Capítulo editado ✔
- ¡ABAJO!
- ¡MALDICIÓN!
- Aquí vamos otra vez -suspiro el monje.
- ¡Dejame ir a mi casa!
- ¡NO! ¡DESPUÉS TE VAS A QUERER QUEDAR ALLÁ! Además, eres la única que está con nosotros que puede ver los fragmentos, te necesitamos.
"Si tan sólo dijeras que eres tú el que me necesitas"
- Pero tengo que ir para hacer los exámenes de esta semana.
- Eso no me interesa, cuando reunamos todos lo fragmentos puedes irte a casa para hacer tu mierda llamada matemáticas.
Esa fue la última gota.
- ABAJO ABAJO ABAJO ABAJO ABAJO ABAJO ABAJO ABAJO ABAJO ABAJO ABAJO ABAJO ABAJO ABAJO ABAJO ABAJO ABAJO ABAJO ABAJO ABAJO ABAJO ABAJO ABAJO ABAJO ABAJO ABAJO ABAJO ABAJO ABAJO ABAJO ABAJO ABAJO ABAJO ABAJO ABAJO ABAJO ABAJO ABAJO ABAJO ABAJO, eres un idiota.-recogió sus cosas- Vuelvo en tres días.
- Maldición...
- Idiota -dijeron al unísono.
****
- Esa niña, ya verá cuando le ponga las manos encima.
- ¿A quien le pondrás las manos encima, medio demonio?
- ¡¿Quién dijo eso?!
Miró en todas direcciones, tratando de encontrar al portador de esa voz ronca y masculina.
- Vaya, lo de idiota es cierto porque, ni sabes quien soy -se burló.
- ¿Qué quieres?
- ¿Como te dejas tratar así por esa perra? Deberías hacer saber quien manda, no dejarte pisotear por ella.
- ¡Cállate! Tú no tienes porqué meterte en lo que no te incumbe.
- Oh, no sabes en lo que me incumbe ese tema.
- ¿Qué? ¿A que te refieres con eso?
- ¿Con quién hablas Inuyasha?
Se sobresaltó, guardando la compostura al ver lo inmerso que estaba en dicha conversión, tanto que no notó la presencia del monje.
- ¿Miroku? ¿Que haces aquí?
- Me dijeron que te viniera a avisar que la cena esta lista.
- Pues, vamos entonces.
- No has respondido mi pregunta, ¿con quién hablabas? - insistió.
- Con nadie -respondió seco y tajante- ahora vamos a cenar.
- Como quieras -respondió rápidamente, ya que no quería meterse en problemas con Inuyasha, sabía lo fuerte que era y no quería terminar con un chichón más grande que su cabeza- "Aún así no me lo creo, hablaba con alguien, lo sé, Inuyasha no esta tan loco como para hablar solo" -pensó mientras caminaba detrás de Inuyasha hacía la cabaña.
****
Aome salió del pozo enojada, ya que Inuyasha como siempre, se interponía en sus asuntos, a veces le daban ganas de mandarlo a volar con un solo golpe.
Salió de la pagoda del pozo dirigiéndose a su casa a paso tranquilo, entró y saludo para ver si salían a recibirla.
- ¡Hola! ¡Ya llegué! ¡¿Hay alguien en casa?!
Fue a la cocina para ver si su mamá estaba ahí haciendo la cena, pero lo que encontró fue un papel en la mesa. Lo leyó.
Aome, si estas leyendo esto y te preguntas donde estamos, estamos en casa de la tía Michell y nos quedaremos allá durante una semana, nos fuimos el lunes y regresaremos el domingo, si pasa algo o quieres hablar con nosotros llámanos a este número: ***********.
Te extrañamos.
Atte: Mamá
- Bueno, creo que solo estamos tú y yo Buyo. -le dijo al minino mientras éste se frotaba contra sus piernas.
Subió a su habitación y tiró su mochila en una esquina, se quitó la ropa, y se dio el lujo de quedarse en ropa interior, ya que con un hermanito pequeño que ni se molestaba en tocar no quería que vieran sus cositas. Se subió a su cama, gateando llego hasta donde estaba su almohada, y se cubrió con la sabana.
Siendo inconsciente de los espeluznantes ojos rojos que la miraban con lujuria desde su armario.
- «Solo espera un poco más perra, muy pronto serás mía»
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Salvaje [E1]
Fanfiction¿Qué tan lejos puede llegar una persona para lograr un objetivo? ¿Qué tanto puede lastimar a la persona que ama, solo para lograrlo? Su instinto animal sale a flote, solo con un objetivo en mente, marcar a Aome, pero, ¿que tantas atrocidades hará p...