Hoy iba a ser un día normal, que no habría nada nuevo, haría lo mismo de siempre y volvería a mi casa y ya está, pero no, ojalá hubiera sido así.
Me desperté con pocas ganas escuchando a él despertados pitar como si el sonido se me metiera en él oído y no me lo pudiera sacar a sí que saque la mano de la cama e intente llegar a él despertador con la mano para poder callar ese sonido que me penetraba el oído. Estuve en la cama 10 minutos después de que ese sonido acabara y me levanté y fui hacia el armario y elegí la ropa que me pondría para ese día. Una camiseta negra con un logro de uno de mis grupos favoritos bring me the horizon y unos vaqueros negros y me dirigí al baño. Cuando entre vi en el reflejo de el espejo a una chica de 15 años, con el pelo negro echo una bola, tenía la piel pálida unos ojos color café y debajo de esos ojos unas pecas color café y con piel blanquecina, no es la típica chica que dirías que es delgada pero tampoco estaba gorda, y esa chica era yo.
Deje la ropa en una silla que había al lado de el lava manos y me desnudé para darme una ducha, mi cuerpo no era el más bonito de todos, pero prefería no mirarlo ante el espejo a sí que me di la vuelta para terminar de quitarme la ropa, me recogí el pelo y después me di una ducha rápida.
Después de esa ducha rápida salí me vestí (aún de espaldas para no ver nada) y cuando termine me di la vuelta me vi, no estaba mal, a sí que salí por la puerta cogí mi mochila que era gris con algunos parches que yo le había incluido me puse una chaqueta negra y salí de mi habitación y baje a La Cocina para desayunar rápido un café.
En La Cocina estaba mi madre e intente ignorarla y la verdad funcionó y tal como ella me ignoro yo también. Me tome el café y fui a salir por la puerta para ir al instituto cuando mi madre me dijo
-anneth que tengas un Buen Día. A lo que yo le contesté
-eso espero. Y salí por la puerta
