POV Félix: Estaba dormido muy profundamente cuando sentí a alguien zarandearme con fuerza, de pronto me levanté en sudor frío, estaba teniendo una horrible pesadilla, abrí mis ojos con fuerza. -Félix, estás bien?-preguntó Springtrap, el cual dormía en la cama de al lado, por q eramos compañeros de equipo. -Uh... Q? -Estás sudando y parecías nervioso. Yo aún seguía hiperventilando. -Solo un sueño... -traté de convencerme a mi mismo. -Me asustaste, no dejabas de moverte. -Voy a ir a tomar un poco el aire... -Voy contigo. -No es necesario, sólo quiero asegurarme de algo. -Bueno, a mi tambien me vendría bien dar un paseo. Ante la seria mirada de Springtrap no pude negarme y con un movimiento le indiqué que me siguiera, eso hizo. Cerca del bosque había una casita, como en mi sueño, en ese bosque habían visto numerosas personas a una chica de pelo blanco con un mechón rosado q destacaba sus orbes luminosos y amarillentos. Iba con cuidado, tratando d vigilar todo a mi alrededor, no quería q Mangle me sorprendiera. Seguí caminando con Springtrap tras de mi sumergidos, ambos, en un incómodo silencio. -Q buscamos? -preguntó de repente. -Perdona? -Pregunto q buscamos. -Nada importante... Me acerqué a esa casita, subí unas escaleras tras de esta y miré por la ventana, ahí estaba, plácidamente dormido... -Quién es? -preguntó Springtrap. -Fede... -Q t preocupa? -Me da miedo q sea atacado por Mangle, pero veo q está bien resguardado... -Tu amigo? -Novio. -le corregí aún mirando su tierna figura por la ventana. -Ya veo, se os ve una buena pareja. -Sí... -Q ocurre? -Nos... Peleamos la última vez q nos vimos... -A causa de...? -Me puse celoso por q le vi abrazado a su mejor amiga... -Es razonable.-le miré confundido. -Lo q quiero decir es q tener celos en una relación es bonito, pero muchos la pueden acabar rompiendo. -Lo sé pero... Mi orgullo no me permite pedir disculpas... -A veces tienes q dejar tu orgullo a un lado y enfrentar tus sentimientos sabiendo q t puedes llevar más de un golpe, pero no debes temer por ello. Yo le sonreí. -Será mejor q nos vayamos ya, casi amaneció. Miré la puesta de sol y afirmé con mi cabeza alejándome de la ventana.
POVEak: -Eak. -escuché muy bajito. -Eak... -volví a escuchar. -Eak, conchetumare, despierta! Ante tal grito me desperté de golpe y me caí de la cama, abrí mis ojos muy lentamente encontrando a Town sobre mi pecho con un aire dolorido. -Q haces, Town?! Me asustas, idiota! -No t despertabas... -Es lo q tiene la noche, Town, q la utilizamos para dormir. -murmuré irónico. -Ui no me digas. -respondió sarcástico. -Si me permites, me vuelvo a dor- Town de pronto se aferró a mi cuerpo abrazándome con fuerza, este puso una sonrisa forzada y murmuró:
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-Eak... -pero segundos después se derrumbó. -Q-q pasa Town? -Tengo miedo, Eak... -Aún puedes dejarlo, vamos a decirles. -No! -yo sorprendido le miré a sus brillantes ojos anaranjados. -No me puedo echar atrás ahora! Hicimos un pacto! -Entonces q esperas q hagamos? -pregunté. Town volvió a refugiarse en mi pecho. -N-no lo sé... Yo le miré confundido al principio y luego con ternura, en verdad era como un niño pequeño asustado de la oscuridad. -Conmigo a tu lado nadie te tocará jamás y quien lo haga, me las pagará. Town me miró con ojos vidriosos y a continuación puso una tierna sonrisa.
