Cruzamos un puente,
el cual,
parecía que no se iba a caer.
Por desgracia se cayó
antes de lo que esperaba.
No me dió tiempo a hacerte dos nudos
con una cuerda a la cintura.
No, no me dió tiempo...
y cuanto me arrepiento...
Solo te hice uno,
un nudo flojo,
con el que caíste al fondo del barranco.
Caíste a esa gran oscuridad,
¡sí esa, la que te daba miedo!
Pero en realidad
no puedo culparme,
porque te cogí de la mano antes de caer
y tú decidiste soltarte.
¿Por qué te soltaste?
¿Prefieres oscuridad a luz?
Caíste al fondo del barranco del olvido,
en el que me olvidaste...
Pero por desgracia,
aunque no lo creas,
yo soy incapaz de olvidar esa caída
de la que te pudiste salvar.
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Si el mundo no decide ponerse en mi contra.
PoetryTe invito a sentarte y leerme con ojos atentos y café en vena. Te invito a odiar o amar estos versos procedentes de las noches con música alta, donde llora el corazón y sangran las orejas. Te invito a un viaje como es debido, donde la cabeza no pien...