Obsesión

💚2. Bomba de humo.

Bomba de humor. Caracterisada por... soltar humo. Gran expliación, ciertamente.

-Es increíble lo George y Fred te dieron -Hermione Granger frunció el ceño, en desacuerdo.

-No es justo, a mí no me dan nada, ¡y eso que soy su hermano! -dijo Ron Weasley dramáticamente.

Harry se encogió de hombros, concentrado en planear la venganza contra Malfoy.

-¿Y qué se supone que haremos?

-¿Qué? -Harry alzó una ceja, mirando a su mejor amiga-. Yo haré.

-Espera -dijo Hermione-. ¿No vamos a participar? -Se señaló a sí misma y a Ron.

-Saben que siempre hacemos todo juntos, somos como un equipo... Pero-Harry dudó-, esto lo tengo que hacer sólo. Es entre Malfoy y yo.

Hermione abrió la boca para replicar, pero, sorprendentemente, Ron intervino:

-Bien, Harry. Pero cualquier cosa, aquí estamos.

Harry sonrió, agradecido, y metió una pequeña bolita en forma de canica en su bolsillo, saliendo de la Sala Común.

Tenía que encontrar al odioso de Malfoy. Si fuera una serpiente rastrera, ¿dónde estaría? Una risa abandonó la boca de Harry al pensar en eso.

Caminó un rato más, acercándose a los alrededores de las Mazmorras, sin adentrarse por completo. Esperaría.

Probablemente pasó más de media hora, en la que Harry se mantuvo vagando con aburrimiento, hasta que una cabellera rubia bien cuidada y una figura de andar arrogante se dejara ver a lo lejos.

Cauteloso, Harry identificó con satisfacción que Malfoy no estaba acompañado, simplemente disfrutando de la soledad. La oportunidad perfecta de arruinar la paz del rubio llegó.

Harry se cubrió con su capa de invisibilidad y arrojó la bomba de humo, creando con otro artefacto de George y Fred un campo que le permitía ver a través del humo.

Draco, en cambió, dejó escapar un grito asustado, agitando las manos y rápidamente lanzando hechizos al azar como esperando atinarlo a uno que desapareciera el humo. No tuvo suerte.

-¡¿Quién hizo eso?! -gritó, blandiendo la varita con actitud "amenazadora"-. ¡Mi padre se enterará!

Harry aguantó las ganas de reír ante la ridícula amenaza y se colocó detrás de Malfoy, en un movimiento rápido empujándolo hacia adelante.

Draco dejó escapar un nuevo chillido, disparando hechizos hacia atrás, sin embargo, Harry ya se había movido de lugar, nuevamente acercándose a Malfoy. Esta vez, le jaló el cabello.

-¿Quién anda ahí? -La voz de Draco sonaba temblorosa-. ¡Responda!

Harry soltó otra bomba de humo, posicionándose al lado izquierdo de Malfoy y dando una rápida caricia a su mejilla. Aguantó las ganas de reír cuando Draco brincó y se puso a disparar hechizos y a gritar acusaciones y amenazas. Mayormente se veía estúpido. Pero... en cierta forma lo hacía ver tierno, en la opinión de Harry.

Éste se la pasó entretenido en asustar a Malfoy un rato más, divertido ante las reacciones del rubio. Harry, definitivamente, creía no haberse divertido tanto en la vida. Además, Malfoy se merecía esa venganza, por todas las que le había hecho a Harry.

Finalmente, Harry, viendo que Malfoy estaba a punto de colapsar, dejó un rápido beso en su mejilla, quitándole la varita y sacándose la capa de invsibilidad, haciéndose visible a los ojos de Draco.

-No pensé que chillaras como una niña de 5 años -comentó Harry, alzando una ceja-. Eso sí que no lo esperaba.

En un principio, Draco quedó tan sorprendido y anonadado que permaneció quieto y en silencio, respirando agitadamente. Sin embargo, cuando su mente procesó todo y volvió a funcionar su cerebro, Draco levantó una mano, apuntando acusadoramente a un Harry sonriente.

-Tú... -La voz le temblaba de la furia contenida-. ¡Tú...!

-Sí, yo -Harry dejó otro beso en la mejilla de Draco y se alejó-. Te he dicho que no se juega conmigo, Malfoy.

E intuyendo que Malfoy estaba a punto de explotar y atacarlo hasta matarlo, Harry se colocó la capa de invisibilidad y salió corriendo, emprendiendo una gloriosa y victoriosa salida. En otras palabras: huida.