20...

310 19 4
                                    


Naruto beso a Sasuke justo en sus labio y se pegó a su cuello como zancudo en fiesta y de allí no se despegó hasta que supieron la razón del porque allí parado en la habitación de Akira.

Toco la puerta y esperó un momento mientras veía como Sasuke entraba a la habitación del último gemelo.

- Puedo pasar hijo.

-Si - el rubio entro y encontró a su hijo en cama con sus cobijas revolcadas y las almohadas en el suelo igual que su ropa recién quitada.

- Akira podemos hablar.
-Uhmm.
- Como te fue con el enamorado.
- Para nada bien, dijo que era un niñato por hacerle ese carta en la cual derrame hasta mi último pensamiento por él.
- Lo siento hijo, de pronto...
-No quiero un de pronto lo quiero a él -calma pequeño- se acercó a la cama y se sentó a su lado – sabes quisiera romperle las greñitas a ese doncel oxigenado por rechazar a mi bebé- se acostó y quedaron al mismo nivel.
- No soy un niño - hizo un puchero.
-Claro que sí, eres como Sasuke.

- Bueno en parte si- abrazo a Naruto y se quedó escuchando el latido de su corazón.

No se lamentaba por pensar en ese amor fallido, su única persona más importante la tenía allí con él, sin importar que sucediera lo tendría siempre a él.

-Akira eres mi hijo, así tengas un mal amor o uno bueno te apoyaré en tus decisiones. En unos años más adelante conseguirás a alguien ya verás, yo sé que sí.

-Claro el gran Akira Uchiha-Uzumaki conseguirá al mejor chico del mundo, ya lo veras. Pero quisiera ese doncel.

-Bueno entonces te ayudare con eso ahora cuando tengas un problema no calles a tu hermano, ustedes los varones piensan que con solo alzar su voz pueden dominar a un doncel piensen en cómo se sentirá. Ha estado custodiado por tu padre y por ti durante 5 años cierto. Entonces yo la madre de la familia no quiero que suceda de nuevo, no le quites a sus amigos sin antes conocerlo.

- Sí, creo que fue error mío. Él fue acosado un tiempo sabes, por eso siempre apostamos a no dejarlo con ningún varón ni que duerma por fuera al menos de que sea con Sora o nuestra prima Mikiko o la pequeña Yumi.

- Esta bien comprendo. Pero cuando este bien y pueda caminar nada les sucederá.

Al rato bajaron a comer, Iruka, Mikoto y Gaara contrataron a un doncel muy recomendado por muchas personas ya que solo se concentraba en su trabajo además de que era casado y tenía unos lindos niños con su esposo, solo se encargaba de cocinar en el momento adecuado y luego se marchaba. Sasuke se encargaba de la limpieza de la casa junto a los niños todos los fines de semana o al menos cuando estuvieran todos a la disposición.

- Gracias por la cena Hokona te puedes retirar.

- Gracias, niños mañana haremos el pastel que deseen - con aquello se retiró, era verdad que tenía un mal carácter, pero los niños lo volvían frágil.

- Es muy interesante su cocinero ¿no? - Naruto se sentía ¿incomodo?

- sí, nos hace buena comida, sus hijos son muy buenos y es muy divertido.

- Que bien - le brillaron los ojos pero no de felicidad.

- Naruto ¿estás bien? - comento Sasuke.

- Si, más que bien.

La cena estuvo buena, los menores vieron una de las tantas películas que su padre les traía para que se divirtieran un rato.

- El capitán Salazar no merece estar allí.

- Te equivocas, acabo con todos los piratas.

- Mentiras, mentiras Jack es un pirata.

- No cuenta.

- Ustedes dos dejen terminar la película, faltan pocos minutos.

- ¿Qué harán con el tridente? - los gemelos opinaban al mismo tiempo.

- No les diré, si hubiesen escuchado sabrían - Akira quien hacía pereza en el mueble miraba concentrado, pero pensaba en ese doncel como le dijo a su madre no se rendiría tan fácil, la primera fue humillado la segunda sería vencedor.

Los padres de la familia estaban en otro sillón hablando sobre temas personales, Naruto estaba en las piernas del azabache este lo abrazaba desde su espalda tan frágil y pequeña su olor tan rico, delicioso le encantaba.

- ¿Entonces desde cuando les cocina él?

- Hace algunos meses, tu madre, tu amigo y mi madre se encargan de las muchachas domesticas que nos cocinan ya han despedido a muchas de ellas, pero con este hemos durado ya su buen tiempo.

- Uhmm si es recomendado por nuestra familia lo acepto.

- Estas celoso – su voz fue melosa, llena de gracia a cada momento.

- Quien yo - rio un ratito - para nada.

- Si lo estas.

- Que no lo esto, me voy.

- No puedes - los dos se rieron un rato. Sasuke comenzó a besar el cuello de Naruto el rubio se erizo y sintió un lindo cosquilleo en su estómago y un gran calor en su pecho, sus manos acariciaban su pecho y rostro mientras el menor volteaba un poco para que sus labios se unieran, sus miradas se encontraron por milésima vez en toda su vida y era como si fuese la primera vez.

- Sasuke que quieres hacer - su rostro estaba decorado de un carmesí tan lindo que Sasuke estaba por devorarlo allí mismo - ¿Sasuke?

- Subamos - lo cargó en su torso y lo arrastró hasta arriba con el cuidado que se merecía por su puesto. Akira ya sabía qué hacer, cuando la película terminara llevar a los pequeños a la cama y supervisa que no fueran a molestar con tables ni computador. El sí tomaría la del un rato.

..

Naruto estaba bajo el calor de Sasuke sus ropas no los cubrían en ese momento solo ellos dos como Dios los trajo al mundo, su manos recorrían la piel del menor mientras besaba la piel morena del rubio, subía hasta sus pezones rosados que tanto lo extrañaba los beso y juego un rato con ellos el otro jugaba con sus cabellos negros azulados ahogándose en gemidos. Metió sus manos por el arco de su espalda atrayendo lo más hacia el dejo de jugar con sus botoncitos y subió hasta sus labios los beso como si algún día los hubiera perdido y no los hubiera recuperado hasta una larga espera. Ligeramente.

Siguió con las tocadas hasta que llegó a su trasero - estás seguro de esto - sus labios se movieron dando lo la orden que siguiera. Lo lubrico muy despacio para no lastimarlo y al parecer lo logro, cómo no lograrlo si esos besos que se dieron fueron como una cura.

- ¡Sasuke! - sus labios fueron tomados y Sasuke lo penetro lentamente y unos minutos después comenzó a embestir suavemente los suspiros salían de sus labios, tenía mucho que no sentía esa sensación y al escuchar los gemidos del rubio le era más satisfactorio.

- Aahh Sasuke - lo abrazo enredando sus manos a su cuello, y el azabache sus manos en la espalda arqueada del menor que estaba por sufrir un orgasmo - no puedo aahh más.

- Yo también terminaré pronto - unos cuantos movimientos más y los dos se corrieron Naruto entre sus vientres y sasuke a dentro de él, cayó en su pecho y sus corazones sonaban al ritmo de un hermoso vals. -yo te amo - suspiro pero no obtuvo respuesta solo un asentimiento de su parte y una cálida mano en su espalda.

Se supone que esto ya hubiese terminado y miren hasta donde hemos llegado al capítulo 20 pero no os preocupéis pronto nos despediremos

Gracias. 

Esperando Por Ti...Donde viven las historias. Descúbrelo ahora