Big kitten.

002

—Michael, me duele mi colita —murmuraba Luke en medio de toda la gente que había en aquel mall—. ¡Michael hazme caso!

—Tienes que estar callado, estoy buscando ropa para ti. ¿Porque no te pruebas esto? —preguntó, tendiéndole unos jeans negros y un sweater negro.

El más alto recibió las prendas entrando a los vestidores. El sweater le quedaba bien, y de hecho los pantalones también, pero apretaba su cola creando un ligero dolor.

Salió de los vestidores ya cambiado con las nuevas prendas: —Mi cola sigue doliendo, pero prefiero usar esto a tu ropa que prácticamente me asfixia.

—Era lo único que tenía. Ven, ya nos vamos de todas formas, ya le pague a la señorita que atendía.

Ambos salieron de ahí con rumbo a la casa del menor. Habían algunas personas que se quedaban embobadas al ver al más alto, aumentando el ego del ojiazul. Pero vamos, ¿quién no lo haría?

También habían personas que miraban al menor, siendo en su mayoría los chicos. Michael quizás no se daba cuenta, pero Luke sí. Así que llevo una de sus manos a las caderas del menor, posesivamente.

Michael no se inmutó, simplemente siguió caminando, cada vez más cerca a su casa. Finalmente cuando llegaron, Michael busco la llave en su bolso y ambos entraron dejando las otras prendas que también compraron.

—¿T-tienes hambre? —preguntó Michael, jugueteando con sus dedos.

—Oh, tengo mucha hambre, pero no estoy hablando de la comida.

—¿Tienes sed? —volvió a interrogar Michael, notándose confundido.

Luke simplemente se paró del sofá y se acercó a Michael. Lo acorraló contra la pared, el menor de ambos mantenía la mirada en suelo mientras sentía ambos cachetes calientes por la cercanía del mayor, y porque le ponía nervioso también.

—¿Pasa algo? —preguntó Luke esta vez con una sonrisa, una de sus manos acariciando la cintura de Michael, sus orejitas se mantenían paradas.

—N-no, p-pero ¿podrías alejarte un poco?

—¿Por qué, acaso te pongo nervioso?

Michael sentía un cosquilleo en el estómago y no podía formular algo coherente. Empujó levemente a Luke y se fue corriendo a su habitación.

Luke aguantó una risa yendo a la cocina, se sirvió una taza con leche y se la tomó pasando su lengua por sus labios cuando finalmente acabo.

Michael se sentó en su cama con el corazón latiéndole fuerte, prácticamente no había pasado nada, pero para él era mucho. Jamás había estado tan cerca con alguien, sin olvidar el hecho de que Luke le ponía nervioso.

(...)

Había pasado ya un tiempo y Michael decidió bajar. Cuando estuvo en la sala, encontró a Luke tratando de prender el televisor y rió por lo bajo cuando lo vio.

—¿Cómo es que funciona esta cosa? —preguntó Luke cuando notó la presencia del ojiverde.

—¿No sabes cómo se hace? Déjame enseñarte, tienes que meter esa cosita en el otro cosito, no es tan difícil —terminó sonriendo tiernamente.

—¿Seguimos hablando de la televisión?

—Si, ¿porque?

—Niño, deberías dejar de hablar así. Cualquiera persona, incluyéndome, lo mal interpretaría.

—No entiendo, ¿porque? —Michael había formado un puchero con su boca, inconscientemente cogió el borde de su falda comenzando a jugar con él.

Luke posó su mirada en la falda de Michael, si tan solo la moviera un poquito más.

Michael al percatarse de la mirada de Luke, cogió una de las almohadas del sillón y lo golpeó: —¡Eres un pervertido! ¡No mires ahí!

—¡Auch! —él mayor sobada su cabeza junto a su orejas— ¡entonces no deberías hacer eso!

—Yo no hice nada, además, esas son mis partes de princesa... —murmuró lo último, sin embargo, Luke lo escuchó.

—Que difícil se nos hará convivir contigo.

—¿Tú y quién más?

—Yo me entiendo —dijo Luke posando su mirada en su entrepierna.

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Son us partes de princesa oie >:v. Volví, ktal.