Mi libro sin final.

# Demencia - Milo: 1 Camus: 0

                                                         # Demencia – Milo: 1 Camus: 0

Título: # Demencia – Milo: 1 Camus: 0

Resumen: Milo esta en descontrol.

Clasificación: "G"

Advertencia: "NO"

Tipo: Divertido para mi lo fue XD

Pareja Principal: MiloxCamus

Autor: M Camus Scarlettverseus

Comentario adicional: pensaba publicarlo aparte porque en serio me gusto pero el 3 cap aun no esta listo.

N· de palabras: 905

# Demencia – Milo: 1 Camus: 0

Anoto por quinta vez el mismo diagnostico en su libreta, escucho a la enfermera decir algo pero la ignoro, contesto lo que sea que le haya dicho con una negativa de cabeza, fuera lo que fuera no importaba. Termino y se despidió con un gesto corporal y salió de la habitación. Una vez afuera se recargo en la pared con pesadez, suspiro con igual cansancio y llevo su mirada a la placa dorada donde se leía un nombre: Afrodita.

Se alejó de la puerta mientras caminaba a su propia habitación privada, masajeo su cuello para liberar tensión, Vio a lo lejos la puerta así que desabrocho su corbata azul y una vez dentro de su habitación la lanzo lejos, bajo su mirada a su mano y detallo su letra en la libreta.

Años y años de estudio en psicología, psicopatía y literatura ¿para llegar a qué? Al punto de estar estudiando a un loco obsesionado con su belleza física. Matar a su propia madre solo porque la consideraba más hermosa, Vaya por dios.

Llevo su mano a secar el sudor de su frente, suspiro antes de echarse en su dormilona cómodamente, siguió pensando... aunque tenía que admitir Afrodita con esos síntomas podría ser muy peligroso, exponerlo a la vida humana sería un error leyó lo anotado en su libreta por quinta vez... psicodélico, diagnostico.

Pero según el expediente este no consumía drogas antes o después de sus ataques. Mmmm

El tintineo incesante de su celular lo saco de su sopor; lo tomo lenta y perezosamente; reviso la pantalla, puedo leer con claridad Saga,... Ahhs soltó un resoplido, su jefe aunque amigo no dejaba de ser su jefe...

Decidió no contestar esta vez, no quería hablar con nadie pero sabía que Saga siempre de insistente no tardaría en mandarle un mensaje.

Solo segundos después a la velocidad que esperaba; el teléfono vibro en su mano y mensaje llego: no perdió tiempo en leerlo:

"deja lo que estés haciendo, te necesito urgente tenemos la llegada de un nuevo paciente, es un caso de alta prioridad, claras muestras de psicosis, APRESURATE"

Resoplo otro trabajo, no de nuevo; se levantado de su dormilona, releyó de nuevo el mensaje... Psicosis... mejor esperar el expediente.

Dio la vuelta en uno de los pasillos y una silla repentina casi le derriba bajo la mira a sus pies de rabillo detallo a un hombre detrás de la silla lo escucho reír; una risa muy raro, detecto una pisca de locura en ella, decidió dejar de divagar y encararlo.

Lo primero que vio fue unos ojos azules, grandes muy grandes casi como dos canicas de un color muy vivaz más que cualquier otro, y una melena que no perdía ese mismo encanto pero despeinada lo analizo; fue fácil deducir que delante de él, estaba un demente; la ropa holgada y celeste las reconoció fácil...

Enfatizo más su análisis personal y llevo su atención a la mano del otro, sostenedora de la silla de ruedas, vendada y con un atisbo de coloración rojiza. Sangre... Su cuerpo un tanto cubierto de tierra, y el brillito leve del sudor tal parece que antes de chocar con él, había estado corriendo o asiendo alguna travesura, lo escucho nuevamente reír y el chillido de la silla al correr hacia atrás capto su atención lo miro ahora más cerca que antes a unos centímetros de, el.

Quiso retroceder para recuperar su espacio vital pero la pared no estaba a más de unos metros detrás, además esa mirada fiera tan desafiante así como la de los demás tenía que demostrar sus nervios de acero. Ese brillo en eso ojos... esa sonrisa de sorna... no pudo evitar pensar PSICOSIS,...Demencia...

–Hola muñeco –lo oyó decir con un acento muy particular, sus neuronas no trabajaron como quería en ese momento porque el origen no lo pudo descifrar, sintió su respiración cerca de su rostro. –Estaba conociendo el lugar, ojala me toque un doctorcito así de galán con el cual pueda juguetear –ensancho su sonrisa enmascarando falsamente lo que esas 8 últimas palabras significaron para él.

El silencio se mantuvo, no recibió respuesta así que gruñendo se alejó de el. Lo miro de arriba abajo sintió rabia de pronto verlo hay de pie mirándolo sin expresar nada ignorando su encanto lo enojo de cierto modo, volvió a gruñir se alejó más, miro de reojo la silla y con su mano vendada la lanzo unos metros lejos de él. Pronto la sorno lo invadió de nuevo y levanto la barbilla en un gesto de altivez y paso a su lado no sin antes... sonrió

Camus observo su pequeño berrinche y anoto mentalmente. "irritabilidad" mmmg... por si acaso volvía haberlo, se relajó solo un poco cuando lo sintió pasar a su lado pero sus nervios se crisparon de nuevo cuando sintió un rose en su trasero, y luego una nalgada

-bello culito doctorcito –lo escucho carcajear y su propio cuerpo tembló de ira, se giró para verlo, para encararlo, no se quedaría con esa, pero boquiabierto se descubrió el; solo en el pasillo. Mmgg ahora le toco a, el gruñir, el resto del día no habría quien lo aguantara...

Pronto descubrió que ese chico será su nuevo paciente demonios su fortaleza seria puesta a prueba. Leyó el nombre en la platilla. Milo, vaya menudo infierno se avecinaba. Suspiro antes de ir a ver a su nuevo paciente...

                                                                    MILO: 1 CAMUS: 0