Capitulo Dos

879 61 4
                                    

Capitulo Dos

Entonces la cuestión es esta:

1. Mi novio me odia y no lo culpo, pero debe entender que no todo gira en torno a él.

2. Tengo una terrible jaqueca y justamente hoy dejé las píldoras en casa.

3. Definitivamente es una pésima semana, no tengo ánimos, ni tampoco quiero sumergirme en mi miseria, ya era suficiente lidiar con el drama de Jordan.

4. Mi hermana se va a casar con el hermano de mi ex novio, lo cual me obliga a aceptar que seremos familia de ahora en adelante.

5. Quería salir corriendo muy lejos, tan lejos sin pensar en todas las cosas que ahora mismo me estaban haciendo perder la cordura, pero la realidad es que no puedo volver a huir de mis problemas.

No me quedaba más que resignarme a toda posibilidad donde escogía mi paz mental, porque siendo sincera, pase mucho tiempo evadiendo todo lo que alguna vez me hizo feliz. Renuncié a mi familia, a mis amigos, al novio que alcancé a amar y a todo lo que alguna vez soñé.

No puedo evitar sentir un sinsabor amargo en mi boca, es casi irreal asimilar como la vida puede darte setenta patadas y aún así mantenerte de pie.

De mala gana tiro mi bolso sobre el escritorio. Me tumbo sobre mi silla y echo hacia atrás mi cabeza. Cierro mis ojos y respiro pausadamente. Era mucho por lo que tenía que procesar. Quería gritar con todos mis pulmones para liberar todos esos agobiantes sentimientos, pero era consciente de que no era el lugar adecuado para hacerlo.

Negué mi cabeza aún sin creerlo.

Kim y Tobías

Debe ser una terrible y pésima broma.

¿En que mundo cabe siquiera esa posibilidad de tener que volver a vivir el intermitente karma?

Innecesario. Ya sufrí por mis acciones y decisiones.

Claramente, el universo conspiraba en mi contra.

¿Me sorprende a estas alturas?

Definitivamente, no.

Solo me bastó tomar un avión y viajar 6 horas lejos de casa para re inventar una nueva versión de mí, aunque lo admito, no fue fácil.

Estaba acostumbrada a tenerlo todo, pero fue cuestión de terquedad la que me hizo saber que era comer mierda sola.

Pagué mis consecuencias ante mis decisiones y no fue sencillo, pero lo logré. Encontré mi propósito y aprendí a vivir. Pero... ¿Por qué tenía está sensación de sentirme estancada?

Tanto esfuerzo y dedicación todos estos años para ser revocados me hace dar cuenta que no sané por completo, todavía tenía una espina en mi corazón, resentimiento y culpa por haber tomado malas decisiones y haberlos apartado.

Porque de no haberlo hecho, este reencuentro no sería tan incomodo como lo imagino.

Apoyé mis brazos sobre el escritorio, posando mi cabeza sobre mis manos y mirando nada en concreto, solo pensando...

Pensando en todo lo que pudo ser y no lo fue

—¿Qué se supone que deba hacer? —pregunto para mi misma

—Dejar de ignorarme —responde Iris, me sobresalto un poco, me tomó por sorpresa su semblante serio y fulminante mirada — ¿Tienes idea de cuanto tiempo tardé en encontrarte?

Camina rápidamente hacia mi escritorio, toma un pupitre y se sienta en él.

—Mucho —responde por mí— estoy cansada —dice quitándose los tacones de puntilla.

Has llegado al final de las partes publicadas.

⏰ Última actualización: Mar 20, 2023 ⏰

¡Añade esta historia a tu biblioteca para recibir notificaciones sobre nuevas partes!

Mi Acosador no tan secreto | SEGUNDA PARTEDonde viven las historias. Descúbrelo ahora