Capítulo: 4 Desesperación.

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Black hat

Se notaba demaciado que la presencia de flug faltaba en esta casa, y no había pasado ni un día.

La verdad estaba enojado, por alguna razón no con flug, sólo esperaba que regresase pronto, pero no lo hizo.

Los días pasaron, tres para ser exactos y no había rastro de el incluso mandé a demencia y a 5.0.5 a buscarlo, pero no lo encontraron.

No iba a buscarlo, apesar de que me sentía sólo, yo no lo buscaría, no importa si me causa problemas con los estúpidos clientes, o si demencia y 5.0.5 me evitan ahora por casi matarlo.

No quiero buscarlo...

Porque se darían cuanta todos...

De que lo necesito.

Estaba durmiendo en mi oficina cuando escuché que la puerta se habría, era 5.0.5 que llevaba una charola con una taza de café.

-Vete 5.0.5 no tengo ánimos para beber café.

El sólo se quedó mirando, y tristemente dio la vuelta.

-...espera.

-urr?

-ven aquí.

Lentamente se acercó a mi, yo me incorporé y pensé que tal vez debía despejar mi mente.

-dame ese café, cambié de idea.

5.0.5 me dio feliz la taza con café justo como me gusta, amargo y caliente.

-Bien ahora vuelve al trabajo.

Asintió y se fue de la oficina.

Mientras bebia mi café, intentaba pensar en otra cosa pero era inútil, seguía pensando en ese idiota.

Poco a poco caia más en la desesperación, los clientes llamaban y yo simplemente los mandaba a la mierda, tenía que buscar al idiota.

Después de asegurarme de que demencia y 5.0.5 estaban dormidos salí de la casa en busca de flug. No sabía por donde empezar, así que primero deambule por la ciudad.

Un vago recuerdo vino a mi mente cuando vi una tienda de música, recuerdo que mi preciado órgano de había averiado y el idiota no sabía reparar instrumentos, así que ambos fuimos a esa tienda para ver si podían arreglarlo.

-Flug...ese fue el único maldito día en donde convivimos sin gritar ni una sola vez.

Maldición, Flug porque no puedes salir de mi cabeza.

-Tu pequeño bastardo!

Golpee un poste de luz haciendo lo caer, gruñi por no poder calmar mi temperamento y seguí caminando.

Vi mi reloj de mano, ya era la 1:00 am y no tenía ni idea en donde podría estar.

Camine y camine hasta que de nuevo vi mi reloj, 2:00 am y no había rastro de flug.

Me iba a dar por vencido cuando vi en donde estaba, en la ferretería donde Flug compra material para inventos.

Mire por la ventana que aún estaba la luz encendida, pero la tienda estaba cerrada, desidi tocar la puerta, minutos después salió un viejo algo malumorado.

Unidos por un accidente black hat x Dr flog Donde viven las historias. Descúbrelo ahora