Es muy común encontrarnos en nuestra vida diario con diversos letreros de advertencia, desde las típicas y conocidas señales viales hasta los carteles de prohibición:"NO tocar", "NO pisar el césped", "NO abrir", "NO...", "NO...", "NO...". Con todas estas imposiciones finalmente terminamos pasado por alto una que otra, pensando que tiene gran trascendencia, pero los avisos están ahí por alguna razón.
Hace algunos años, se mudó al edificio una familia con varios hijos, entre ellos, un pequeño maleducado de nueve años. Se dedicaba a molestar a todos sin recibir castigo, pues a su familia no le importa mucho. en un par de semanas, andaba en la zona de mantenimiento apagando los sistemas ; hubo multas y llamados por las familia por esto, pero no respondieron a nada.
Pero cuando el brinboncillo desapareció, movilizaron a toda la ciudad, trajeron a los medios de acusación para acusaron por lo sucedido, argumentando que desde un inicio NO nos agradaba. Por suerte para nosotros, hasta en ese punto había cámara de seguridad, en las grabaciones se le vela entrar a la zona de calderas. Se acercó hasta un enorme letrero que decía: "NO ABRAS LMmA PUERTA", pero aún así, lo hizo, la imagen se distorsiono un poco, pero claramente, hasta NO dejar rastro de el.
Yo observaba a escondidas, me sentí tan nervioso como los demás testigo del vídeo. la PUERTA Esta va tapiada, según decían los vigilantes se hizo veinte años atrás cuando algunos chicos desaparecieron en las misma k jU condiciones, en ese entonces ocultaron todo, tal como lo haría también en esta condición.
El caso fue enterrado, NO escuche nada más de el, pero e continuado mi vida con miedo desde entonces, porque nos quedamos en el mismo edificio, vi muy bien lo que sucedió, esa sombra podría fácilmente a través gruesas paredes de concreto, NO veo como podría contenida ahí dentro, pero al menos aprendí bien mi lección. No andaría por ahí abriendo puertas que no debo.
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NO ABRAS LA PUERTA
HororSe trata de un chico que es irrespetuosos y se portaba muy mal y su familia no le decía nada