Hoy me despido de aquel amigo incondicional que es tuvo para mi en las buenas y las malas. Aquel que cuando necesitaba una mano, me extendió una pata, Aquel que me sacó una sonrisa en medio de mi tristeza, aquel que siempre supo como consolar me y hacer que dejara de llorar.
Ese amigo que cuando todos se fueron el se quedó ahí con migo.
Ya eras y serás siempre una parte de mi.
No fuiste una mascota, para mi fuiste un amigo,un hermano, un ángel de la guarda. Espero que donde quieras que hoy estés sepas que siempre te amaré y recordaré cada momento que pasamos juntos, tanto buenos como malos ,tanto divertidos como tristes. Y no hay duda alguna de que gracias a ti fui feliz mientras duro nuestra estancia juntos, Gracias compañero, amigo, hermano.
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Donde quiera que estés miraré al cielo para recordar tu mirar y tu ladrido de felicidad cuando llegaba a casa.
