"¡Pero... Somos Hermanos!" (MarioxLuigi) [ PRIMERA ENTREGA ]

"Fue Él"

Saludos:
XxYunoMimoxX
biankittaa

Muchas gracias por dale ★ y comentar :3

Primera publicación: 11/06/2017

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- Y-Yo... N-No dije a-algo como eso. - Dijo retrocediendo nervioso.

- Repito. ¿A qué te refieres con distraer? - Dijo serio y se acercaba al Mayor.

- E-Este, lo que pa-pasa es que yo... Eh... - No sabía que decir.

En eso el Mayor choca con una de las paredes de la casa, da un quejido por el impacto y sin aviso una mano se posa con fuerza al lado suyo, el Mayor voltea a verlo con inseguridad mientras es aprisionado con ambos brazos del "Bandolero verde".

- Si ese era tu objetivo... Lo hubieras dicho desde el principio - Dijo dando una sonrisa perversa.

- ¿Qué?.. - Dijo dilatando sus pupilas.

[ ... ]

~ 04:36 Hrs. ~

El Profesor se encontraba dentro de su laboratorio, después de un largo tiempo limpiando un poco el desastre, se puso manos a la obra. A pesar de que tenía dificultades y algo de sueño, no perdía la esperanza de que saldría bien... Estaba tan concentrado que no se dio cuenta de una presencia detrás suya.

- ¿T-Todo bien? - Preguntó calmado.

El Profesor dio un pequeño brinco por la impresión, haciendo caer varios utensilios que tenía consigo. Volteo a ver a donde se dirigía aquella voz que lo llamaba, se quitó unas gafas protectoras que tenía puestas para ver con mejor claridad.

- ¡Oh, Kinopio!... No te esperaba. - Dijo calmado.

- Eh... Sí. - Dijo mientras volteaba a otro lado por un momento. - Como ya sabes, son las 4 de la mañana, por lo cual se me ocurrió que querías algo de café por tu esfuerzo. - Dijo mientras tenía una taza con cierto líquido caliente en una charola entre sus manos.

El Profesor sintió un pequeño calor en su cara por su amabilidad. Este se acerca y toma aquella taza con cuidado mientras lo miraba de reojo.

- G-Gracias. Lo necesitaba. - Dijo con un leve sonrojo.

- No hay de que. - Daba una risa nerviosa mientras posaba la charola sobre su pierna.

Este daba pequeños sorbos a su café, se sentía un poco incomodo, no solo por su presencia, sino por el silencio que había. Era raro que el Maestro cambiara después de su plática.

- ¿Cómo vas con la formula? - Preguntó para tener un tema de conversación.

- Este... Aún no llevo nada bueno. - Respondió sincero.