Bienvenido, Venganza...

Bestia.

       En la tierra hace muchos años, existían bestias, brujas y mucha hechicería, esta historia comienza cuando llega el invierno al pueblo de Galeón, donde vive un hombre llamado Roger, que vive junto a su amada esposa Laura y su pequeña hija Giselle. Roger es un hombre fuerte, valeroso y muy honesto.

Un día en el pueblo, Roger trabajaba en la herrería, pidió horas extras para ganar un bono para llevar más dinero a su casa para su esposa e hija, ese día pues, se había hecho muy tarde y Roger debía irse a su casa, así que una vez terminado sus horas de trabajo decidió volver a su hogar.

Cuando iba por el camino encontró a un soldado herido en el suelo, Roger corrió a ayudarlo. - ¿Pero que os ha pasado? – Preguntó Roger. – 7 bestias vinieron al pueblo destruyendo todo y se llevaron a las mujeres y niños. – Roger sorprendido lo miró estupefacto. - ¿7 bestias? ¿Cómo es posible? ¿De dónde han salido? – Pregunto Roger desesperado, a lo que el soldado le respondió – Son las 7 bestias maldecidas por Dios....

Roger preocupado coloco al soldado en un lugar seguro y se fue decidido a buscar a su familia, para ver cómo se encontraba; Se dirigió al pueblo agitado y asustado. Al llegar encontró el pueblo destruido y desolado, esto lo asustó más, por lo que se apresuró a llegar a su casa, la cual encontró totalmente destruida y vacía.

Roger buscó sobrevivientes con la esperanza de encontrar a su esposa o a su hija, con lágrimas en los ojos y con miedo por no saber si estaban bien; Cuando de pronto vió una mano que se asomaba entre los escombros, allí pudo encontrar a su casi muerta esposa, Roger se desesperado con lágrimas en los ojos y en shock le pidió a su esposa en sus últimos momentos de vida que le dijera donde estaba su hija, y su esposa le respondió. – Las bestias se la llevaron, encuéntrala y cuida de ella, por favor... – Luego de ello dejó de hablar y dio su último aliento, Roger con mucho dolor gritó como si fuera una bestia herida. Luego de un rato de tanto llorar, Roger decidido partió a buscar a su pequeña, ahora con una mirada distinta, más fría, más sombría... Empezó yendo a la armería del pueblo, oh mejor dicho, lo que quedaba de ella, allí se encontró a un viejo amigo llamado Dog. - ¿Qué haces aquí? – Le preguntó el hombre. – Me han arrebatado lo que más amo en la vida, quiero venganza. – Respondió Roger fuerte y seguro. Dog estaba sorprendido por la mirada fría de su viejo amigo, desbordaba ira y sufrimiento. Dog al ver su dolor lo pensó y decidió ayudarlo, pues sentía pena por él, así que le ofreció su ayuda, y Roger, con una mirada cansada e irritada lo aceptó.

Roger y Dog se dirigieron a la montaña más sombría del lugar, se tardaron 3 días, pues quedaba algo lejos, se decía que allí habitaban aquellas bestias malditas. Una vez allí se escabulleron por las montañas, entre catacumbas que estaban cerca de un rio, Allí encontraron a la primera bestia llamada "Soberbia". - ¿Qué hacéis ustedes aquí, malditos humanos, irrumpiendo en mi morada? – Pregunto aquella bestia con voz gutural. Roger sacó una enorme espada y le dijo. – Hemos venido a matarte. – Roger empuñando su espada, se dirige hacia la bestia, sin ninguna gota de miedo para tacharlo, combatió con aquella bestia ferozmente sin rendirse, pues, cuando se lucha con un propósito nada es más duro que la voluntad. Dog anonadado por la feroz batalla, se armó de valor y siguió con el plan, brincó a la cabeza de la bestia y lo sujeto fuerte para que Roger lo asesinara.

Llegando a donde estaban "Tristeza" y "Frustración", otras dos bestias. Roger les lanzó la cabeza de Soberbia hacia sus patas. Estos dos valerosos hombres habían creado un sistema de poleas en uno de los pilares de las catacumbas, para derrumbarla, haciendo que cayeran encima de las bestias. Siempre les pareció mejor pensar y actuar antes que actuar y no pensar. Luego se adentraron más a las catacumbas, se escurrieron por cuevas, y encontraron a otras dos bestias "Pesar" y "Traición". Roger y Dog empuñaron armas para combatir estas bestias, ya que, aunque no tenían gran tamaño, si tenían una mandíbula feroz. Roger luchando le cortó la cabeza a Pesar, mientras que Dog resultó herido por Traición, Roger se dio cuenta de esto, y se abalanzó sobre la bestia, con mucha más ira de la que tenía, y lo decapitó.

Luego por fin encontraron a "Blasfemo" y a "Muerte". Estas dos bestias eran las más fuertes, y Dog estaba herido, Roger se encontraba herido y cansado, pero eso no lo detuvo. – Ooh.. Valientes Caballeros, ¿Qué los ha traído a matar a mis hermanos? – Preguntó Muerte. Roger solo quedó en silencio conteniendo el aliento. - ¿No pensáis responder?. – Pregunta esta vez Blasfemo. Roger se armó de valor y pidió que le entregaran a su amada hija. Las bestias sueltan una enorme carcajada y lo miran burlonamente. – Has llegado tarde, todos los niños han muerto. – Dijo Blasfemo. Roger quedo perplejo, sin poder creer lo que le acaban de decir. Sintió mucho dolor dentro de sí, desesperado, se llenó de ira y frustración, y sin temor a nada que pudiera perder ya, sacó su espada y se abalanzo contra las bestias, esta vez con sed de sangre. Después de haber luchado tanto, ni siquiera Roger podía comprender la fuerza con la cual se enfrentaba a aquellas bestias, pues estaba muy cansado y herido, y su compañero Dog estaba a punto de morir.

De repente, Las bestias, con grandes alas, y grandes pezuñas, volaron sobre Roger, hablando en otras lenguas, lo rodearon totalmente, Roger empezó a sentirse diferente y más liviano, les preguntó.

- ¿Qué me están haciendo, malditos?.

- Por tu sed de sangre, te hemos clasificado como uno de los nuestros, así que ahora estas maldecido, Venganza...

Roger sorprendido sintió como se transformaba por dentro y por fuera, lleno de furia, tristeza, sufrimiento, dolor y ganas de matar, se convirtió en lo que el menos había deseado y lo que más había odiado, una bestia.

Así Roger quedo condenado de por vida... a la miseria.

Fin.