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Sheyla Blossom

No quería que mataran a Cheryl. No quería perder a otro miembro de la familia. Ya habían sido dos en menos de un año. No quiero tres.

-Me dió tanta pena ver cómo tu padre le disparaba a Jason sin piedad.-negó con tristeza sarcastica.-Lo peor de todo fué que yo le dí la idea a tu padre Sheyla.-sonrió como un psicópata.

-¿Qué?-me abalancé sobre el y le di un puñetazo.-Ahora lo vas a pagar caro maldito bastardo. ¡Kevin!-lo llamé con lágrimas en los ojos.-Llama a tu padre, ¡rápido!-me coloqué encima de Chuck y le agarré las manos detrás de la espalda.-¡Kevin! ¡No veo que estés marcando!-grité.

-¡Estoy en eso, maldición!-gritó a lo lejos.

-Ahora si te vas a arrepentir de lo que hiciste. ¡El padre de Jughead está en la cárcel por algo que tú y mi padre hicieron.-pegué su cara al suelo.-Archi, encárgate de Dilton.

-Oigan enserio Chuck me amenazó, yo no quería.-soltó el cuchillo y liberó a Cheryl.-Enserio, Chuck me tenía amenazado.-habló.

-No te creo.-habló Joaquín.-Veamos si dirás la verdad frente a una serpiente.-eso hizo estremecer a Dilton.

-No por favor...-me miró a los ojos.-No quiero ir a la cárcel. Tengo un récord limpio y...¿qué ejemplo voy a darles a los de mi brigada?-insistió.

Negué, tenían que pagar AMBOS por lo que hicieron. Tal vez Dilton era cómplice de la muerte de Jason.

-No.-hablé.-Tu también eres parte de esto.-agarré mas fuerte a Chuck.-No seas cobarde como mi padre.-espeté.

Archi tenía a Cheryl abrazada mientras Cheryl sollozaba en su hombro.-Por un momento pensé que iba a morir.-Verónica la abrazó.

-Tranquila, ya estás aquí.-le sonrió.

-Chicos mi padre llegó.-luego de 10 minutos Kevin había vuelto. Su padre llegó y esposó a Chuck.

-Chuck amigo...-habló el Sheriff.-...-me sorprendes, no esperaba que fueras así.-lo subió a la patrulla y luego volvió.-¿Alguien mas que tenga que llevarme?-preguntó.

Miré a Dilton, su respiración subía y bajaba. Sus ojos estaban cristalizados y me miraba suplicando. Hasta que caí...caí en su estúpido juego.

-No, nadie más Sheriff, gracias.-el Sheriff asintió y se fue.

-Gracias Shey...-me levanté y lo abofeteé.

-Lárgate.-todos me miraron confundidos. Estaba molesta, Dilton casi mata a mi hermana y luego dice que lo obligaron.

-Sheyla.-Jughead se acercó a mi y colocó su mano en mi hombro.

-¡No me toques!-grité.-¡El tenía que irse con Chuck! ¿y que sucedió?-miré a Betty, Verónica, Archi, Jughead, Joaquín y a Cheryl.-¡Está aquí! ¡Haciéndose el inocente!-volteé a ver a Dilton.

-Sheyla.-Jughead intentó calmarme.-Tranquilízate.-me miró a los ojos. Lo abracé y comencé a llorar.

-El casi mata a Cheryl.-sollocé.-Jugh, casi mata a Cheryl. Tenía un cuchillo en su cuello y...-me interrumpió.

-Shh.-acarició mi pelo.-Tranquila, no llores.-besó mi frente.-Ya, ya está.-acarició mi espalda.

-Jugh, tu no lo entiendes.-miré hacia abajo.-Tu no...-Jughead hizo que lo mirara.

-Si, si entiendo.-me abrazó de nuevo.-Si entiendo lo que es no hacer justicia, si entiendo lo que es no poder vengarse, y; si entiendo lo que es perder a un ser querido. Sabes, cuando mamá se fue con Jellybean, sentí que el mundo se me venía abajo.-me tranquilizó.

-Por eso te quiero.-susurré a su oído mientras todos nos miraban.

¿Pero eso era verdad? ¿Le quería?

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Gracias.

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