[PAUSADA] Ahora soy...¿Marin?

Ahora soy...¿Adrianne? [Especial]

¡Hola! ✨ Este es un especial, por lo tanto no afecta la historia.

Es el primer capítulo pero visto desde el punto de vista de Adrienne (Adrien).

Me lo pidieron mucho en la otra app donde subo este fanfic.

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«—Señorita Adrianne, en 15 minutos la espero abajo para el desayuno, por favor no tarde.»

Una voz masculina parecía estar detrás de mi puerta. No lo entendía bien, tal vez Nathalie mandó a alguien a despertarme.

Tenía tanto sueño y mi cabeza me molestaba levemente.

La luz entraba por el gran ventanal de mi habitación, pero bueno, es un nuevo día y quería estar en la escuela. Había quedado con Nino para que escucháramos el nuevo álbum de Jagged.

Caminé hasta el amplio baño y escuché a Plagg reírse un poco, pero no le tomé importancia, algún chiste malo le estaría contando a su apestoso queso.

Restregué un poco mis ojos y me miré al espejo.

— ¡AHHHHH! — Plagg voló hasta entrar en el baño, evidentemente no podía dejar de reír

Se escucharon varios pasos que se detuvieron en mi puerta.

— ¿Sucede algo señorita? — de nuevo esa voz.

— No sucede nada, casi me caigo, eso fue todo — traté de sonar bastante normal.

Pareció convencerse porque rápidamente escuché los pasos alejarse.

Tomé todo el aire que mis pulmones podían almacenar y volteé mi mirada de nuevo al espejo.

— ¿Qué es esto? — toqué mi largo cabello acomodado en ondas — ¡Oh Dios! ¿¡Y esto!?— habían un par de bultos en mi pecho que definitivamente no tenía — ¿¡Qué sucedió?!

— Un akuma — respondió con pereza Plagg.

— ¿Un akuma? ¿Cómo? No recuerdo nada...

¿Cómo un akuma podría causar esto? Además, en serio mi mente no recuerda ninguna pelea.

— Así como lo oyes, chico. Bueno, chica, no tengo tiempo para más. Tengo hambre, ¿dónde está mi Camembert?

Rodé mis ojos. Plagg nunca es de gran ayuda.

— ¿Crees que Ladybug lo recuerde?

La pregunta quedó en el aire. Pero es una alta posibilidad, ¿por qué lo recordaría solo yo?

Tantas preguntas.

Tomé una ducha tratando de no mirar o tocar demasiado. Esto era tan incómodo.

Salí y rodeé mi nuevo cuerpo con una toalla.

Al llegar a mi armario entré en crisis: enaguas, vestidos, tacones, maquillaje y la temida ropa interior de mujer.

¿Quién en su sano juicio inventó los endemoniados sostenes?

Terminé con lo que creo es un top deportivo, busqué la camisa más holgada y un jeans. Aún conservaba mis tenis, fue un alivio encontrar algo familiar.

Adrien Agreste no usaría vestido bajo ninguna condición. No tengo la menor idea de cómo actuar como chica.

— Si lo ves positivamente, ahora puedes hacer "nyan nyan" como las mujeres que ves en esos dibujos chinos antes de dormir

— Es anime, Plagg, no dibujos chinos y no haré "nyan, nyan" —dije simulando ser un gato.

Plagg siguió riendo.

Tomé mi mochila y salí.

Me encontré con la mirada de asombro de Nathalie, bueno creo que es ella, pero ahora es hombre. Mis aspecto no debió ser el mejor ya que me miró de pies a cabeza y pareció asegurarse de que mi padre, bueno, madre estuviese cerca.

Esto es realmente horrible y abrumador.

Agradecía que Nathanaël o Nathan, no sabía como decirle ahora se mantuviese callado.

La imagen de mi compañero pelirrojo pasó por mi cabeza, ¿estaría todo París afectado? ¿Nino sería una chica? Hasta mi chofer/guardaespaldas era ahora una mujer alta y bastante musculosa.

Miré mi celular, mis contactos no estaban como los dejé: Nina, Chléo, Mamá, Kimi, Alym...

Esto es peor de lo que parece. Al menos seré capaz de no confundir sus nombres.

En la entrada pude ver a Alym y Nina hablar, cerca estaba quien debía ser Marinette.

— ¿Qué te sucedió Adrianne?— Nina la miraba de arriba hacia abajo. — No sueles venir tan desaliñada, amiga.

No pude evitar sonrojarme. Me excusé con la falta de tiempo y que me había quedado dormida. No podía decirle que ayer era un chico y hoy amanecí siendo chica.

Escuché a alguien decirle Marin a Marinette. No vi su nombre en mi lista de contactos, en algún momento le pediría su número.

Es extraño no tener el número de mi primer amiga.

— Hola Marin y hola Alym — saludé cortésmente, recibí un saludo de parte de los chicos y subimos los 4 a la clase.

Era muy extraño ver a mis compañeros con su sexo contrario. Alym y Marin eran mas altos. Nathalie con el pelo por la cintura, Kim mas pequeña y Alix más alta.

— Hola mi Adrianne preciosa — un rubio de ojos celestes se acercó por detrás: la versión masculina de Chloé. Sabrina, como siempre, detrás de él.

— Hola Chléo...— respondí secamente, no estaba de ánimos para sus coqueteos. Solté bruscamente la mano que Chléo quería besarme. No dejaría que un chico besara mi mano.

Tal vez a mi lady.

— Adri querida, ¿y el hermoso vestido de la colección de Gabrielle's que andabas ayer?— lo miró fulminante.

— No andaba de ánimos para usar vestido Chléo, creo que deberíamos tomar asiento porque ya debe venir mada...— hice una pausa, estuve apunto de meter la pata — el profesor Bustier.

Caminamos cada uno a nuestros asientos. Nino me enseñó una revista donde aparecía XX, la nueva sensación de París.

El profesor no tardó en aparecer. Y la clase comenzó.

¿Dónde estará mi lady? ¿Estará tan confundida como yo?

No podía dejar de pensar en ella, ocupaba verla con urgencia. Necesitábamos arreglar esto lo más rápido posible, porque en serio me volveré loco o loca, ya no sé.

¡PUM!

Se escuchó una fuerte explosión en París.

Estaba tan feliz, eso significaba solo una cosa: había un akuma cerca y Kitty Noire tenía que hacer su aparición.

Te veré pronto, bugaboo.

Corrí a transformarme.