Prólogo.

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Prólogo.

Estaba muy nerviosa.Sin duda alguna,en cualquier momento,iba a vomitar el desayuno de esta mañana,que había consistido en un bol lleno de cereales.

Hoy era la entrega de notas de uno de los exámenes más importantes de el último curso.Estaba en cuarto de la ESO y estábamos a principios de Mayo.Eso solo significaba una cosa y era que sólo faltaban dos meses para que me dieran mi preciado título.

El profesor Benett se encontraba sentado en su gran escritorio color marrón oscuro.Como siempre iba muy arreglado,con su corbata y su pelo canoso echado ligeramente hacía atrás.Miraba seriamente,ya que era su típica expresión a la hora de tratarse de trabajo,los exámenes de todos los alumnos que se encontraban en el aula.

Como lo hubiese suspendido se me caería el pelo,mi madre me ahorcaría y no saldría durante todo el verano.Mi madre era muy estricta a la hora de tratarse de los estudios.

Miré de reojo a Bianca,mi mejor amiga,que se encontraba en la otra punta de la clase.El profesor Benett nos habia separado y nos había puesto a cada una en una esquina diferente,ya que como él dice hablamos mucho.Bianca estaba muy acalorada, y lo sabía por que estaba sudando como los pollos y se abanicaba fuertemente para alejar la calor que hacía.Alejar la calor y junto a eso los nervios.

Yo siempre había sido mucho mejor que Bianca en tema de estudios.A ella le costaba mucho más ya que se distraía con cualquier cosa y dejaba los estudios para última hora sabiendo que se jugaba un título muy importante. Siempre con su típica frase que me hacía reír "Ni con título eres alguien".

-Estoy bastante decepcionado con gran parte de la clase.-Dijo el profesor Benett negando con desaprobación. Todos nos miramos con cierto nerviosismo.-Perdonadme por la palabra,pero estos exámenes son una mierda.-Benett y su típico vocabulario.-Ya veo la atención que habéis prestado algunos estas últimas semanas,y digo algunos por que unos seis de la clase han aprobado el último examen de lengua.-Se escucharon suspiros de resignación por toda la clase.Todos estábamos muy molestos.

Yo estaba acalorada.Rezaba el padre nuestro una y otra vez para que ojalá fuese alguna de esas seis personas que habían aprobado.Si suspendo yo misma me ahorco. Bianca estaba triste,estaba triste por que ella misma sabía que no era una de esas seis personas y la verdad a mi también me apenaba.

-Voy a repartir los exámenes.-Dicho esto y sin más interrupciones,repartió los exámenes. Pude escuchar como mucha gente se quejaba y maldecía por lo bajo,pero también pude escuchar gente que sonreía con emoción al ver que habían aprobado.

El profesor se paró en mi mesa,eso significaba que mi examen ya estaba aquí. Cerré los ojos por un momento y suspiré.

-Buen trabajo,señorita Morgan.-Dijo el profesor Benett a la misma vez que dejaba mi examen sobre la mesa.Al ver la nota se me escapó un pequeño gritito de emoción,a lo que algunas personas se empezaron a reír y otras solamente me miraban.

¡Había sacado un jodido diez!

Estaba más feliz que unas castañuelas.

-Guárdese sus emociones para cuando llegue a casa,señorita Morgan.-Dijo Benett mientras terminaba de repartir los últimos exámenes.

Estaba muy orgullosa.Los días que pasé castigada en mi habitación realmente sirvieron ¡Te amo,mamá!

Sonó el timbre para irnos a nuestras casas y todo el mundo se levantó como locos para después desaparecer de allí. Yo hice lo mismo,pero me resultó bastante extraño que Bianca no me hubiese esperado como siempre hacía a la hora de irnos.

Salí del recinto y empecé a buscarla, pero no había rastro de ella.Seguramente se habría ido enfadada por haber sacado una nota pésima en el examen.Caminé sola hacía mi casa como siempre hacía todos los días. No sé por qué, pero notaba como si alguien estuviese mirándome intensamente.Era una sensación muy rara.

Obssesion.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora