Soy un saco de tela áspera. Rebosante de dolor, pena, rencor, rabia, tristeza, decepción, y tal vez aún le quede algún testigo de tu falso amor.
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
Mi tela está rota, destrozada, deteriorada, rajada y algo descosida, por los golpes y las caídas, puñetazos y puñaladas que me va dando mi mierda de vida. Entre los huecos deshilachados de mi se van escapando las pocas emociones, que había estado guardando desde hace años...
