ERAS MI LUZ EN LA OSCURIDAD﷼

Capítulo 1

₪CAMBIOS INESPERADOS₪

Habia pasado ya un mes desde la muerte de mi padre en ese tragico accidente, del cual todos incluyendo a mi madre me hacian responsable.
Luego del accidente estube inconciente durante dos dias, así que me perdí todo el el velorio y funeral de mi padre. No me pude despedir de el, de la persona mas importante para mi.
Pero apesar de que mi madre comenzó a sentir desprecio hacia mi, pero siempre tuve el apoyo de la unica persona que siempre estuvo a mi lado y nunca me dejo sola, Mark Leebrand, mi mejor amigo de toda la vida, estamos juntos desde el preescolar, alli nos conocimos.
Yo simplemente era la tipica niña solitaria, sonriente y que tenia miedo a hablar con las personas, pero gracias a Mark perdi ese miedo, el poco a poco se fue acercando a mi y nos volvimos mejores amigos desde ese entonces.
Nuestros padres también se hisieron amigos en especial el señor Leebrand y mi papá,ya que ellos siempre lo fueron desde la secundaria fue una gran coincidencia.
Siempre compartimos las clases pero habia una gran diferencia entre nosotros... En mi clase habia una especie de "Representantes" entre hombre y mujeres. El mas lindo y el mas inteligente entre los chicos. La mas linda y la mas inteligente de las chicas.

Entre los chicos Mark era el representante de los dos grupos ya que era guapo e inteligente. Mientras que entre las mujeres habia una para cada grupo Avery Tomson representaba la belleza, a pesar de ser linda por fuera no era igual por dentro, ella me odiaba no se el motivo pero así era. Y mientra yo, Megan Hopks era la representante de los inteligentes, no estaba de acuerdo con esto de los "Representantes" pero sin contar con mi opinion me elijieron como La Nerd de la clase.

-Meg!!- gritaron por afuera de mi habitación sacandome de mis pensamientos- Megan ¿Estas ahí dentro?...-no respondí la verdad queria estar sola despues de lo que mi madre me dijo no queria ver a nadie- Megan por favor abre la puerta se que estas ahi...no me voy a ir hasta que abras o contare hasta tres y la tiraré, total ya lo hise una vez jejeje- al oir eso me acordó aquella vez que me enoje con el y como no queria abrir la puerta la derribo de una fuerte patada, me reí leve- UNO...DOS...TR-Abrí la puerta y vi como su pie estaba preparado para golpear.

-Ya esta bien no hace falta que rompas mi puerta, otra vez...-Entramos a mi habitación y cerré la puerta nuevamente-Perdon por no abrirte es qur queria estar sola y bueno por eso pero como siempre llegaste tu y me alegraste el dia.-Dije para luego abrasarlo por el cuello al cual el correspondió rodeando mi cintura con sus brazos
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-Sabes que yo siempre estare para ti, eres mi mejor amiga nunca te dejaré sola y tampoco permitiré que nadie te lastime-dije aun abrazado a Meg cuando de repente escuchó y sollozo proveniente de la persona frente a mi. Me separe un poco y vi su rostro, sus ojos cerrados y lagrimas que recorrían sus mejillas. Tome su rostro entee mis manos para que me mirara- Meg mirame...-dije para despues una de mis manos levanto su mentón dejándome ver mejor su rostro, ella enserio era hermosa sus ojos color café, su mejillas con unas pequeñas pecas apenas visibles y ese leve rosado que tenían cuando Meg se sonrojaba su nariz fina y perfecta y sus labios inchados con su color rojo natural, ella en verdad era hermosa. Sacudi mi cabeza y salí de mis pensamientos-Tengo qur ayudar a mi amiga-dije en mi mentepara luego hablar- Meg ya te lo he dicho yo siempre estare a tu lado y no dejaré que nadie te haga daño okey?- dije para luego ver como asentia rapidamente.-Y bueno ahora cuentame ¿Que te hiso tu madre ahora?- Pregunte sin sonar como un entrometido sólo queria saber que le había echo La señora Melisa que desde el accidente lo único que hacia era culpar a Meg por la muerte del señor Chandler y se había vuelto una mujer muy fria, dura, cruel y mala pareciera como si Meg no le importará en lo absoluto como si no fuera su hija. Como si lo único que siempre hubiera importado hubiera sido sólo el señor Chan. Lleve a Meg hasta cama para que se sentará luego traja la silla de su escritorio y me senté frente a ella tomarla de sus pequeñas y suaves manos.