Yuri Katsuki es un chico de 23 años sin absolutamente nada de vida social ya que se pasa la mayor parte del tiempo jugando videojuegos y comiendo sin parar. Un día su consola de video se quema por sobrecalentamiento y al ser la cuarta vez que le su...
Este es el primer fanfic que creo acerca de algo que ha llamado mucho mi interés y es esta maravillosa serie. Primero la había publicado en Amino, pero decidí que ya que tenía wattpad y recientemente aprendí a usarlo podría publicarla aquí también.
Espero les guste y ¡vamos con el primer capítulo! 😎😎
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Yuri debía haber estado corriendo por lo menos 10 minutos sin parar por todo el campus y ya estaba quedándose sin aliento. Habían pasado años desde la última que corrió tanto y todo para ser uno de los 20 que obtendrían la nueva versión de Assassins Creed 6 meses antes de su estreno, pero ahora sentía incluso más euforia que en ese momento.
— ¡Eh! vamos detente, no es divertido si te escapas.
Yuri siguió corriendo hasta llegar al fondo del pasillo. ¡No podía creer que ese chico le había tocado el trasero! Y con tanta naturalidad. Dios ¿En que se había metido? Ya no podía dejar de repetirse esa pregunta una y otra vez.
— ¿Dónde te has metido? Vamos sólo quiero jugar un rato.
Oh no. Era ese chico de nuevo. Yuri comenzó a caminar rápidamente hasta que encontró una puerta que llevaba a las duchas. Bingo, ese sería un buen escondite. Caminaba de espaldas por la habitación ya que el vapor le bloqueaba la vista. Finalmente pudo entrar en un cubículo que parecía vacío, pero apenas retrocedió un paso chocó con la espalda de alguien.
— ¡Eh-eh! — Yuri lanzó un grito.
Se dio vuelta rápidamente para pedir disculpas con la mano tapando sus ojos, pero resbaló con el piso mojado y para no caer se agarró de lo pudo.
— Vaya, vaya. Así que el nuevo es un pequeño travieso. — Habló una voz masculina.
Yuri retiró la mano que tapaba su vista sorprendido por la respuesta del desconocido respecto al incidente para ver que tenia en frente a un chico de cabello plateado y ojos azules que lo miraba con diversión y unos segundos después se dio cuenta que el objeto del cual se habia afirmado para no caer era la toalla que lo envolvía y ahora el chico estaba...
— Mejor dicho —El chico de ojos azules se le acercó.— Un pequeño cerdito travieso.
"¿Por qué me pasa esto a mí?" pensó Yuri.
🔥🔥
Antes rebobinemos un poco esta ridícula historia.
Primero que todo tenemos que volver 10 horas atrás cuando la vida de este cerdito...
— ¡Hey! eso es ofensivo, tengo un nombre.
«No es mi culpa que te veas como una chuleta gigante, sino tuya que no cierras la boca. Bueno, lo que sea, no interrumpas mi narración»
