Ya sé que soy horrible por tardar una semana en publicar este capítulo :'( pero más vale tarde que nunca, ¿no?
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¡Gracias!
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Marcus llamó a la policía y nos llevaron junto a David a la comisaría para declarar. Los chicos me preguntaron si no quería llamar a mis padres, me negué y les dije que ni siquiera les conté nada sobre la otra noche, no quería preocuparlos. Esto hizo que John me regañara, lo cual me recordó a mi madre.
Le expliqué al oficial todo lo que pasó desde el día que salvé a Grace de David en el callejón oscuro, hasta hace unos minutos cuando me atacó con un cuchillo. El oficial nos dijo que estaba seguro de que David permanecería tras las rejas. Eso me hizo sentir aliviada. Después de eso, salimos de la comisaría.
Me siento tranquila ahora, pero sigo temblando un poco. No sé qué habría sido de mí si ellos no hubieran aparecieron en ese momento. David estaba tratando de meterme dentro de su auto para secuestrarme o violarme, quien sabe. Cierro los ojos y respiro hondo.
—Mejillas rosadas.— Oigo a Alec decir, haciéndome abrir los ojos. —Toma.— Me da un caramelo cubierto por una envoltura roja. —Te tranquilizará.— Lo agarro.
—Gracias.— Le digo y miro a los chicos. —En verdad, gracias a todos ustedes, estoy muy agradecida.— Digo y siento que mis ojos comienzan a mojarse, de repente me siento vulnerable y débil al recordar el cuchillo afilado en mi estómago.
—Has tenido mucha suerte.— Dice Marcus poniendo una mano en mi hombro. —Pero estoy muy contento de que estés bien.
—Sí. Gracias a Dios Marcus llamó a la policía porque Alec estaba a punto de matar a ese hombre.— John dice mirando a Alec que está cruzando sus brazos sobre su pecho.
—¡Por supuesto! ¡Atacó a Grace y a Arianna! ¡Merecía morir!— Alec está realmente enojado, es obvio por su tono de voz y su rostro.
—Cálmate, hombre. Se acabó.— Marcus palmea su espalda para calmarlo.
Pongo el caramelo en mi boca. Es sabor de fresa, mi favorito. De repente, me cubro la cara con las manos. ¡Mis padres van a matarme! Ni siquiera les mandé un mensaje. Tomo mi celular y miro la pantalla. Tengo veinte llamadas perdidas de ellos. Si David no me mató, mis padres lo harán con seguridad.
—¿Que pasó?— Alec me pregunta viéndome entrar en pánico.
—Mis padres. ¡Me matarán!
—Diles que estás con tus amigos.— John dice mientras desata su cabello rubio, que llega hasta su hombro. —Porque seguro que no les dirás lo que realmente pasó, ¿verdad?
—Por supuesto no.— Ni siquiera en un millón de años.
—Díles que te cruzaste con nosotros y que cenarás con nosotros. Te llevaremos más tarde.— Marcus dice. Asiento pero dejo de moverme.
No puedo decirles que estoy con chicos. Ni siquiera les dije que cuando fui a cenar con Grace y sus amigos, que esos amigos resultaron ser hombres. En lugar de enviarle un mensaje de texto a mi madre diciéndole que estoy cenando con Marcus, Alec y John, le digo que estoy con Grace. Eso bastará. Suspiro cuando envío el texto, llamando la atención de los ojos azules de Alec y me levanta una ceja.
—¿Son tan malos?— Él pregunta, casi riendo.
—Son...anticuados.— Respondo y vuelvo a poner mi celular dentro de mi bolso.
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Poco A Poco
Teen Fiction-¿Quieres que mienta? No puedo mentir sobre hechos, sobre lo que está a vista. Eres hermosa.- Dice francamente. Siento a mi corazón latiendo rápido y no puedo respirar apropiadamente. Que alguien lo detenga, por favor, antes de que me desmaye. La tí...