Papá abandonó su oficina y pasó por el living mientras se dirigía hacia la cocina. 5 minutos después sentí un peso al lado mío en el sillón.
“Qué haces?” – preguntó mientras le daba una mordida a su sándwich.
“Nada solo… quería recordar un par de cosas. Tu sabes, sobre… casa” – saqué cuidadosamente una foto mía y de Justin de una de las páginas.
Papá rió entre dientes. “Qué?” pregunté mirando su expresión nostálgica.
“Lo recuerdas?” – dijo él tomando la foto.
“No mucho… pero era uno de mis amigos, por lo visto”
Rió. “Kara, él era tu mejor amigo”
“En serio? Pero espera… por qué aún ríes?” – pregunté con curiosidad.
“Los recuerdos que tengo de ustedes dos son bastante divertidos” – dijo con una sonrisa.
“Cuéntame” – le pedí mientras volvía a cambiar de página.
“Bien… déjame recordar. Hmmm. Oh sí! Recuerdo una de las peores.
Una tarde después del almuerzo de un sábado, querían jugar a monstruos y superhéroes, así que fueron a su casa, que tenía un patio más grande que la nuestra, para poder correr más. Al cabo de una hora y media tu madre recibió una llamada de Elizabeth, la madre de Justin” – me contaba mientras nos acomodábamos en el sillón. “Tiempo de anécdotas”, pensé.
“Entonces ella dijo en un tono serio ‘Me debes una sábana nueva’. Tu mamá no entendía nada, pero obviamente, lo relacionó con ustedes. Cuando mamá preguntó qué había pasado, Elizabeth dijo ‘Ven a verlo tú misma’ y soltó una risa” – no quería que papá se sienta mal por el recuerdo de mamá, así que le dije que tenía que estudiar. Tan solo una excusa para que deje de contarme.
“Bien, pero espera terminaré la historia” – me agarró del brazo y me volvió a sentar en el sillón lentamente.
“Está bien, qué sucedió cuando mamá fue a casa de Justin?”
“Ella y Elizabeth fueron hasta el patio, donde ustedes estaban acostados en el pasto, mirando las nubes pasar. En un rincón, al lado de la cerca, había un bulto blanco… bueno, más marrón que blanco”
“Oh mi dios” – dije yo mientras soltaba una risa.
Papá sonrió. ”Era una sábana… cuando mamá la levantó… sep, fue peor de lo que pensó”
“Qué tenía?!”
“Bueno, además de ser marrón, tenía recortada las letras “SJ” en el medio”
Un recuerdo vino repentino a mi mente. “Súper Justin…” dije con una sonrisa tonta.
“Si” – rió papá. “Empiezas a recordar un poco. Pues bueno, no tuvimos más remedio que comprarle otra sábana a Elizabeth, porque fuiste tú quien recortó las letras para Justin”
Empecé a reír a más no poder. No recuerdo haber sido una niña tan… terrible?
“Espera, aquí llega la cereza del pastel, y la parte irónica”
“Le compramos la sábana?”
“Por supuesto que lo hicimos, y tú elegiste una con un superhéroe en ella”
Después de un rato más de hablar sobre nuestro pasado en Canadá con papá, me moría de sueño, así que me fui a dormir.
Al día siguiente dormí hasta tarde. Sí, en serio… hasta tarde. Eran las 12 del mediodía cuando sentí unas pequeñas sacudidas en la espalda.
“Levántate, dormilona” – dijo mi papá, para luego abrir las cortinas. El sol me dio en la cara.
“Es un hermoso día hoy, hace un poco de frío, pero es uno de los últimos días de primavera”
“Ya voy” – dije, casi como un susurro. Hundí mi cabeza en la almohada.
“Muy bien, el almuerzo estará listo en media hora” – cerró mi puerta lentamente.
A eso de las 4 de la tarde, Sunny pasó por mí para ir al centro comercial.
“Vamos a pasar la mejor semana de tu vida” – dijo mientras se ponía en marcha.
“Sacando hacer mi ensayo de Biología de la lista” – sonreí.
22 de Taylor Swift comenzó a sonar en la radio, y como no, comenzamos a cantar.
"It feels like a perfect night to dress up like hipsters
And make fun of our exes, uh uh uh uh
It feels like a perfect night for breakfast at midnight
To fall in love with strangers, uh uh, uh uh
Yeaaaah
We're happy free confused and lonely at the same time
It's miserable and magical, oh yeah
Tonight's the night when we forget about the deadlines, it's time. uh uh
I don't know about you but im feeling 22
Everything will be alright if you keep me next to you
You don't know about me but I bet you want to
Everything will be alright if we just keep dancing like we're 22, 22!"
Cuando regresé a casa, me encontré con un bolso en la entrada. Mi hermano estaba de vuelta. Corrí hacia la cocina y me subí a su espalda de un salto en modo de… abrazo?
“Hey!” – exclamó el mientras me bajaba. Lo abracé.
“Te había extrañado, tonto”
“No me jodas” – dijo él riéndose. Golpeé su hombro.
“Yo también” – dijo él con una sonrisa.
Papá preparó la cena y yo puse la mesa, mientras Tom bajaba corriendo por las escaleras.
“Ya está?” – preguntó, robando una de las papas de la bandeja.
“Ya casi…” – dijo papá, mientras Tom se acomodaba en la mesa a mi lado.
Fue una cena bastante divertida. No puedo negar que Tom puede hacer que te rías incluso cuando estás en tus días. Pero lo de las mañanas sigue siendo cierto, te ve y te odia, solo por el hecho de haberlo mirado.
Papá se llevó a Tom a su oficina para hablar tranquilos. Yo sabía lo que vendría.
A cabo de una hora, Tom bajó las escaleras.
“Está todo bien?” – pregunte cautelosamente.
“Crees que está todo bien?” – preguntó el, mirándome con una cara seria.
“Yo tampoco quiero irme” – susurré mientras me acercaba a él.
“Eso no es justo. Qué se supone que haré de mi vida?!”
“Lo mismo que todos, vivirla. Todo estará bien”
“Volveremos a ver a mamá?”
La pregunta me tomó por sorpresa. Mamá nos había llamado 3 veces por semana a lo largo de los años. Aunque últimamente no recibimos ni una llamada o mensaje.
“Intuyo que sí…” – suspiré.
“Me llamó hace un par de días” – dijo, mientras ponía sus pies sobre la mesa, actuando indiferente.
“En serio? Qué dijo?”
“Lo mismo de siempre”
Decidí no continuar la conversación y me dirigí al cuarto de baño para tomar una relajante ducha y poder dormir. Mañana tenía tarea por hacer. Esa noche... soñé con él. Justin.