Couronne de larmes

Règle # 1 Kelbeti

No sabía cómo había ocurrido semejante atrocidad, o bueno tal vez si, vivíamos en un mundo demasiado injusto para nosotros, yo era la prometida oficial de Otabek Altín pero sabía que el estaba enamorado del pequeño Yuri Nikiforov, eso no me molestaba, yo lo consideraba como un hermano, o bueno veía en el a mi difunto hermano, quién falleció en manos de un maldito Alfa que hizo su vida un infierno, y la historia la conocía Ota quién era mí amigo desde que tenemos recuerdos, ambos sabemos que no nos amamos, pero las reglas son claras... y sólo podíamos romper el compromiso si teníamos una mejor propuesta, y el tenía en mente la casa Nikiforov, pero a pesar de sus esfuerzos no logro conseguír al pequeño niño, recuerdo muy bien que Sala, la beta de quién estoy enamorada me contó que la negativa de enlace radicaba en que el abuelo Koyla le mencionó a su hermano el médico de la família que temía que ocurriera lo mismo que le sucedió a Yullia, sus cuerpos frágiles no aceptarían la Unión y empezarían con los problemas que la llevaron a la muerte, yo trate de explicárselo al idiota de mi prometido pero la bruja de su madre ya lo había envenenado, así que me volví amiga del rubio, en parte para saciar mi necesidad de tener de vuelta a Itan con migo, en parte porque temía que esto sucediera, y ahí estaba yo recreando mis pesadillas, Yuri... estaba tirado en el suelo con un charco de bajo el, su cuerpo emmpezaba a conviccionarse, su cara amoratada, su cuerpo lleno de mordidas y hematomas, era la misma historia, era Itan...
Le llamé a Sala, se encontraba con JJ y rápidamente trasladamos a Yuri a la clínica de su hetmano.
El ambiente era tenso, cuando Michele salió sentí que me desvaneceria, logró contener las hemorragias internas ocasionadas por los golpes recibidos, había estado en riesgo de perder un ojo y... realizó un legrado de emergencia, recomendaba reposo absoluto y terapia psicológica.
Leroy lloraba a mares y le pidió entrar a la habitación, yo se lo permití porque no podría ver a Yuri en ese estado, pero le pedí a Sala tomará fotos del pequeño para mandarlas al Sr Altín.
Pasamos una semana en la clínica para poder darlo de alta, semana en la que el estúpido Oso no se atrevio a contestar mis mensajes.
JJ no se movía de la habitación más que para tomar bañarse, o salir a comprarle flores al pequeño, el amor que le profesaba era desbordante, pero sabía que l despertar debía llevarmelo al Palacio Altín; Cuándo abrió los ojos, empecé a llorar,
-Yuri, pequeño, perdoname, yo te juro que estaré contigo, yo no te voy a abandonar.
-Mila... mi bebe...
-Pequeño... el... estará en un lugar mejor... el...
-Entiendo...
No lo resistí, me avalance a el, y comencé a llorar.
-JJ... el ¿lo sabé?.
Y cómo si lo invocara, entró a ña habitación en ese momento, traía un hermoso ramo de tulipanes holandeses, y al ver a Yuri no se contuvo y lo abrazó tan fuerte que casi lo tira de la camilla.
-Bebe, mi ángel, Perdóname por todo lo que te est pasando, Perdóname por llegar tarde a la subasta...
-JJ... yo... Perdóname, si quieres alejarte... yo
- Gatito, ¿qué pasa?
-Yo... yo perdí a nuestro hijo, yo... o Dios, Perdóname, soy el peor Omeg del mundo... soy una escoria, el me toco, estoy sucio y manchado...
- No, no, calma, amor, tranquilo, ti eres un ángel, mi ángel y nuestro hijo está junto a Yullia, ella lo esta cuidando, junto con Kolya.
Era un momento tan triste, que sentía que no debía interrumpir, así que salí de ese cuarto.
Pasé a la recepción, tenía que liquidar la cuenta, pero me llevé la sorpresa de que todo estaba saldado por Leroy, pero quería qué el comprobante llegara a la oficina Nikiforov.
Decidí ir a dormir ese día, sabía  que Yuri  necesitaba ese tiempo con Leroy, pero yo debía ir a aclarar unas cuantas cosas con cierto idiota.
Llegué al despacho de Otabek, entré y lo ví dormido en su sillon, así que me acerque y le avente agua en la cara.
-Explícame ¿disfrutaste de violar a Yuri l grado de dejarlo al borde de la muerte?
-¿De qué mierda hablas?
-Otabek Altín, aún sabiendo la historia de mi hermano, te entrevisté a dejar a yuri convulsionando en el suelo al provocarle un aborto por intentar marcarlo
-Sólo lo hiciste por la estúpida norma de aparoencia, explícame!!!!
No podía controlarme, a pesar de ver incertidumbre en los ojos chocolate, yo quería que me explicará...
- Yo... Mila... entré en celo, no pude contenerme, yo... quería hacerlo mío.
- Pero lo dejaste tirado y sangrando,si yo no hubiese llegado ahora estaría muerto...
- Mila, yo... no pude... yo... yo... yo lo amo, pero él...
-Nadie mata a quién ama, nadie!!! te recomiendo que medites en lo que hiciste, porqué mataste la única oportunidad de qué te mirará con otros ojos.
-No!!!, le hice un favor, ahora nada lo retiene a Leroy, ni a Nikiforok, el aprenderá a amarme, yo... yo le exigiré que me ame, el será sólo mío...
- Me das lástima Altín, me das lástima...
Salí de ahí, escuché sollozos y el sonido de cosas destrozandose, Otabek no lo sabía pero sería juzgado por sus pecados, y su verdugo sería un ángel de ojos verdes...