Alguien para hacer locuras,
para escaparme de aquí.
Alguien con el que pueda ver el amanecer y el anochecer.
Alguien que me ayude cuando
hayan cristales en el suelo
y mi suerte ande descalza.
Alguien que odie amar
pero ame ser amado.
Alguien que sepa que voy a fallar
pero me ayude a conseguirlo.
Alguien con el que pueda mirar
al cielo y decirle lo que siento.
Alguien que viva cada momento
como si fuera el último.
Alguien que convierta mis errores en anécdotas con el tiempo.
Alguien que abandone su guerra
para luchar contra mí.
Alguien que escuche los susurros
del demonio, pero haga caso
a los gritos de Dios.
Alguien que conozca mis defectos
y a pesar de eso, se quede.
Alguien que no crea en el amor
pero en mí sí.
Alguien que convierta mis pensamientos desiertos
en recuerdos de Oasis.
Alguien que me mire mientras duermo y me ignore cuando despierto.
Alguien que escale mis sentimientos sin llegar a tropezarse.
Alguien que me haga olvidar el dolor
para volver a poder sentir el amor.
Alguien que me ayude a romper
las cadenas que nos atan.
Alguien que me haga brillar
en la noche más oscura.
Alguien que no tenga miedo
de ser quien es.
Alguien que me haga subir
pero no me deje caer.
Alguien que me silencie en público,
pero me idolatre en secreto.
Alguien que no se esconda detrás
de las cortinas de los prejuicios.
Alguien que sea capaz de
iluminar mi camino.
Alguien como tú.
Por ejemplo.
