Campanada 1

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El sol ya salia de su escondite, era un nuevo día para visitar la vieja ciudad. Cuando aun era 2000, antes de la actualidad en la que vivo ahora. ¡Oh! Lo olvide, me presento yo soy Lucius, un huérfano que fue adoptado y criado para ser odiado por el mundo. Mis crímenes son imperdonables, y mi historial esta completamente manchado pero a quien le importa. Yendo al grano, soy un maldito sociopata eterno.

— ¿Señor le gustaría tomar algo?, aquí en Benny's servimos lo mejor de la casa — .

— Me gustaría pedirle a usted, si no le molestaría mucho. Tal vez  ¿una cita? —.

Si, me encuentro justamente ahora en mi cafetería favorita, coqueteando con la mesera. Soy patético y un fracasado con las muchachas jóvenes, pero  vale la pena intentar con una mesera, lo aseguro.

La chica me miro con una sonrisa forzada y, ¡chan chan!, me rechazó. No le di vueltas al asunto y salí del lugar. Mi siguiente objetivo ya no es alguien para tener placer, tengo un poco de hambre y se me antoja algo de carne fresca.
Mi mirada se posa en un hombre mayor con su esposa.

Perfecto. Para que esperar

Me dirijo disimuladamente hacia ellos y los sigo hasta una zona un poco apartada de la gente, ellos por su parte no se dan cuenta de mi presencia y siguen platicando con risas y halagos. "Que aburrido". Digo en mi mente y me enfoco en mi misión.

Pero algo me detiene, un extraño perfume pasa por mis fosas nasales. Es hay donde veo a mi estrella. Ella pasa justo por delante de nosotros y se dirige a la escuela. Lo se por el elegante uniforme que porta, y por los pesados informes que lleva. Yo también pase por la escuela antes, solo que no llevaba alta costura ni grandes informes. Yo era....... Yo.

Me detengo un segundo y cambio de opinión. "Yo quiero a esa estrella". Digo para mi y pongo marcha hacia la escuela, no sin antes chocar con un joven mas alto que yo, pelirrojo y con una mirada mas seria que la muerte.
Este me mira unos segundos y pasa de largo, hago lo mismo sin voltear a pedirle disculpas, típico de mi.

Aprieto el paso un poco desesperado. En verdad quería conocerla, algo en ella me llama la atención y me vuelve un poco loco. Pero mi actitud cambia al ver que una chica se le acerca y la lleva a rastras hacía un lugar mas apartado.

¿que pretende?.

Las sigo como maniático y me escondo detrás de unos barriles que estaban allí apilados. La conversación que entablan seria de mi agrado si no se refiriera a mi estrella como pareja.......¿pareja?, ¿serán bisexuales?, en este tiempo las personas repudian a gente como yo. Pero no me importa, por que no me han descubierto, además de que soy el asesino favorito de la ciudad.

Que rayos estoy diciendo?... Se supone que debo asesinar a la pareja, así me quedaría con mi estrella, por que ellas no pueden estar juntas. Maldito Lucius celoso y patético, ¿que rayos estas viendo?.

Debo ser paciente y esperar a que se quede sola, así sera mas sencillo. Y después haré a mi estrella mía. Aunque la culpa me consuma, yo la tendré.

oye tu.....volteadijo alguien a mis espaldas. Le hice caso y voltee a ver, no pude creerlo.

Era un joven alto, cabello liso y negro, sus ojos eran bicolor y su tez pálida. Me quede viéndolo un buen rato antes de que me golpeara la cabeza con un tubo y me dejara inconsciente.

★★★

No se cuantas horas han pasado, ni que día es. Lo único que se ahora, es que estoy amarrado a una silla con una cinta adhesiva cubriendo mi boca, el tipo que me golpeo estaba sentado al frente con una cara de pocos amigos. A decir verdad, estoy atrapado en un cuarto horriblemente sucio, con sangre y pintura que se cae a pedazos.

ya despertaste bella durmiente, es hora de las preguntas.

Se acerco a mi y me quito la cinta de un tirón, este tipo es bastante molesto desde mi punto de vista.
No aguante mas y le enseñe mi verdadera apariencia, mi cabello celeste, mis ojos rojos y mis  características que me definen mejor, mis dientes caninos afilados junto a mis monstruosas orejas y cola.
El sujeto aun así ni se inmuto. En respuesta solo se limitó a sonreír y enseñarme de nuevo el tubo con el que me golpeo, esta vez en mi estómago, tire un poco de sangre por la fuerza con la que lo hizo. Fue desagradable.


¿Were are you?|| Lynx The WerewolfDonde viven las historias. Descúbrelo ahora