Capítulo 6: "Soy confesiones"

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Frisk abrió los ojos por culpa de la luz que entraba por la ventana, no quería levantarse pues su cuerpo dolia demasiado, sin hablar de aquella parte baja que ya le exigía ayuda, sonrió al recordar lo sucedido en la mañana, y se levanto de forma lenta para controlar un poco el dolor.

No le extraño el no ver a Sans, ya se imaginaba que algo así pasaría, pero nada le quitaria la sonrisa del rostro, aunque fuera solo por lástima ese esqueleto del que llevaba enamorado desde hace diez años lo había hecho suyo.

–Despertaste... Toma! – Papyrus lo recibió en la cocina sirviendole un plato de avena con leche, el chico se sentó con dificultad pero abrió los ojos como platos cuando junto a la cena el esqueleto mayor dejo una caja de pastillas contra dolor.

–Sans las dejo para ti, dijo que de seguro tendrias que usar dos, te a dolido tu cabeza?...– casi sonaba como tetera caliente por culpa de la verguenza, pasados unos minutos ambos terminaron dirigiendose a la sala.

Papyrus al parecer estaba terminando su traje, solo falta un día para la fiesta, nyeh! compre telas de colores muy lindos, solo que, creo que algunas ni siquiera las usare.– Frisk se acerco y rebusco en las bolsasPapy! Puedo quedarme con esta!?– era de un rosa perfecto ante la mirada del joven. –No soy nada bueno costurando pero... Creo que puedo pedirle ayuda a mamá. – el más alto le dio la bolsa entera donde estaban esas telas y el castaño las subió a la habitación.

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