Temari abrió los ojos encontrandose a Sakura frente a ella aún inconsciente. Se sentó rápidamente cosa que estuvo mal, ya que la abordó un terrible mareo.
-¡Ugh, no aguanto mi cabeza!-un quejido la hizo mirar en dirección a Tenten quién ya estaba de pie sobando su cabeza con ambas manos.-¿Qué rayos fue eso?
-No lo se, pero lastimó un poco mis ojos, no los cerré a tiempo para evitar esa luz.-respondió Hinata a su pregunta, la ojiplata estaba con su espalda recostada en el tronco de un árbol y sus ojos cerrados en estos y su nariz se encontraba un camino de sangre.
-¿Te encuentras bien?-preguntó rápidamente Temari al ver su apariencia.
-Sí, no es nada grave.-dijo la ojiplata abriendo sus ojos.-¿Ustedes?
-Solo me duele la cabeza y estoy un poco entumecida.-respondió Tenten.
-Igual a Tenten, añadiendo un leve mareo.-dijo con simpleza Temari mientras se ponía de pie.
-Será mejor despertar a Ino y a Sakura para revisar que sucedió en ese lugar.-dijo Tenten ayudando a Hinata a levantarse.
-Estoy despierta, solo no podía escuchar bien hasta hace unos momentos y decidí permanecer inmóvil hasta que se me pasara.-decía la pelirosa sentandose lentamente.- Nunca había visto o sentido algo así.
-Sakura tiene razón, cuando lleguemos a Konoha debemos informale esto a Tsunade, es algo muy extraño y el hecho de que haya pasado en una batalla, porque estoy segura que de ahí vino, quiere decir que puede ser algún tipo de jutsu peligroso.-dijo la Hyuga.
-Añade el sangrado. No solo Hinata sangra, tú Temari no se si aún estas algo aturdida pero tus oídos estan sangrando al igual que tu nariz. Al despertar, yo también estaba igual.-apuntó Tenten. La mayor tocó sus oídos y sus dedos tocaron la humedad de su sangre.
-Démonos prisa en llegar a Konoha, esto no me gusta.-dijo la mayor sacando un pañuelo para limpiarse.
-¡Ino despierta! ¡Reacciona cerda! ¡No es hora de dormir!-decía la pelirosa moviendo el cuerpo de su amiga. Esta despertó sobresaltada, tosiendo con algo de fuerza para luego ponerse de rodillas y vómitar. Alarmadas fueron en su ayuda, siendo sorprendidas por ver que la rubia solo vomitaba sangre negra y algo coagulada.
-¿Ino estas bien? ¿Por qué te pusiste así?-decía una desesperada Sakura ofrenciéndole agua. La rubia comenzó a respirar pausadamente, tomó un poco de agua y lentamente se puso de pie con ayuda de sus amigas.
-Estoy bien, tranquilas. Creo que todo fue a causa de la luz y el ruido. Me aturdió un poco.-dijo la rubia con una sonrisa para tranquilizar a sus amigas.
-¿Segura?-preguntó con algo de duda Hinata.
-Sí, es mejor irnos. No quiero experimentar eso otra vez, también quiero ver que pasó más adelante.-las demás un poco más calmadas, pero aún no muy convencidas del estado de su amiga asintierón. Al ver que Ino podía caminar sola y todas estaban mejor, fueron en dirección al sol, donde esperaban encontrar algo que las ayudara a entender que había pasado.
***
Mala fue su suerte. Al llegar solo encontaron escombros, arboles despedazados, shurikens por todos lados, hoyos en la tierra, sangre y a la vista tres cuerpos inmóviles. Eran suficientes pruebas presentes de una batalla.
-Hinata, usa el Byakugan para encontrar algún sobreviviente. Sakura e Ino revisen los cuerpos. Tenten mira en los alrededores, busca alguna pista para entender que pasó aquí.
Cada una acató las órdenes de Temari, Sakura e Ino revisaron los cuerpos econtrandose con la piel pálida y fría, como sospechaban estaban muertos. Al mismo tiempo ambas compartieron una mirada de preocupación, revisando sus ropas tratando de encontrar una marca distintiva de una aldea u organización se dieron cuenta del sangrado en nariz, oídos, ojos y boca de los cuerpos. Justamente los cuerpos presentaban los mismo efectos que les ocurrieron a ellas. Sabiendo esto y sin encontrar nada más fueron en dirección a Temari. Hinata por su lado usaba su Byakugan buscando cualquier señal de chakra con Tenten a su lado. Llegando a un árbol caído pudo ver que debajo de él habían varias líneas de chakras.
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Misión Rango S: Cuidar de Ellos
FanfictionLas chicas van de vuelta a Konoha después de dos largos años de haberse ido a una misión en Suna. ¿Qué pasará cuando en su camino de regreso, se topan con sus compañeros?, pero ellos ya no son los jóvenes de 18 y 19 años. No, ellos son unos bebés, q...