ESPECIAL [1]

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Días después de que todos los santos que lucharon en la guerra santa contra Hades, ellos dormían profunda y plácidamente en sus casas. Sage, quien también revivió, se encarga de vigilar que todo esté bien con ellos.

Esta mañana Sage va de casa en casa, iniciando por la última, Piscis. Dentro del templo de los peces se ve a un joven de largo cabello celeste durmiendo cómodamente, abrazando un tierno panda de peluche; murmuraba algunas palabras pero no se entendía nada en lo absoluto.

—¡que rayos dices! —dijo Sage desde la puerta de la habitación. Se acercó al cuerpo inerte y lo inspeccionó; revisó que sus signos vitales.

Cuando estaba por irse, el santo de piscis se levantó abruptamente y le causó un susto al Patriarca; segundos después se volvió acomodar para seguir durmiendo y abrazando su panda.

Después se dirigió a la casa de Acuario, donde el santo guardián esta dormido como si de un estado de coma se tratase. El anciano Patriarca entró y sintió el frío del lugar. Se apresuró a la habitación donde el santo de cabello verde se hallaba y lo revisó a detalle, ya que parecía muerto.

—a ver, a ver —dijo Sage y descubrió el cuerpo y revisó que se encontrará bien. Lo cubrió de nuevo y salió de allí.

Atravesó la casa hasta la salida y bajó hacia el templo de Capricornio, donde se encuentra el santo de cabello negro. Una vez dentro de los aposentos privado, lo vio tirado boca abajo en el suelo.

—¡Por Athena! —gritó el anciano y corrió hacia él, lo levantó como pudo. Agotando sus energías lo subió a la cama.

Lo cual fue muy difícil ya que el santo se retorcía como gusano en un comal caliente y no se dejaba sujetar. En fin, después de casi treinta minutos de luchar, logró su cometido y lo pudo subir a la cama. Por fortuna seguía vivo y lo dejó seguir durmiendo como bebé.

Sage descansó un poco antes de seguir a la casa siguiente. Respiró profundo y lo meditó un poco.

»¿debería seguir?

Se cuestionó. Más su deber lo llamó y fue la última petición de Athena, él pudo hablar con ella antes de que partiera al Olimpo.

Se puso de pie y siguió hacia Sagitario. Donde encontró a un castaño dormido y abrazado a su almohada, en posición fetal.

—Sasha, Sasha —murmuró en repetidas ocasiones mientras daba suaves caricias. Sage lo miró un tanto perturbado.

Sin más se dirigió a Escorpio. Donde el santo se retorcia y gritaba como si torturarán. Al ver eso, Sage casi le da un infarto, lo dejó a solas y siguió al siguiente templo.

Dentro de la casa de la balanza, se encontró con un santo que dormía no solo como bebé, también roncaba. De pronto parecía tener una conversación con alguien, pero no se le entendía nada.

—¡Shion! ¡Shion! —murmuró entre su sueño —, ¡que te esperes!.

Se escuchó molesto el santo de libra. Sage lo escuchó y pensó que estaba con el guardián de la primera casa, lo cual era imposible, puesto que se encontraba en su templo igual de dormido que los demás. Sin más, entró en la habitación y lo arropó.

El Patriarca se dirigió hacia virgo, para encontrar a su guardián en posición d loto sobre la cama.

—¡omh! ¡omh! ¡omh! —esa frase se mezclaba con un leve ronquido.

Sage al verlo creyó que estaba consciente y lo sacudió un poco, pero el santo dejó escapar un suspiro acompañado de un sonoro ronquido. Trató de acostarlo, pero estaba tan tieso como un muerto y decidió cubrirlo con una manta.

Salió bufando de virgo y fue hacia leo, donde el guardián se encontraba profundamente dormido, por ratos ronroneaba como gato y otras se movía como si estuviera corriendo. Sage lo vio y no hizo nada más, intuyó que si se acercaba terminaría arañado.

El patriarca caminó con rumbo a cáncer, pensó "ya quedan menos templos". Una vez que ingresó en la casa del cangrejo, encontró al crustáceo que se reía como hiena retrasada; se acercó con mucho cuidado para averiguar que le ocurría, pero se dio cuenta que dormía como oso en hibernación. Despreocupado, fue a donde los gemelos. Dentro solo había uno de los guardianes y estaba tan tranquilo que solo con verlo desde la puerta supo que estaba bien.

Continuación hacia Tauro, al llegar el templo se sacudía desde los cimientos por los estruendosos ronquidos del santo; el patriarca entró con mucho cuidado, fue a su habitación y ni bien observó al santo, salió corriendo hacia aries. Mientras corría por su vida, le suplicaba a Athena y todos los dioses —menos Hades — que el templo no se le cayera encima.

Ya dento del templo del carnero, se encontró con que el santo guardián dormía como roca, con un hilo de baba saliendo de su boca y mucho cabello sobre su cara. Sage le aventó la manta encima, se dio media vuelta y regresó al Templo Patriarcal.

—ver a estos mientras duermen es jugarse la vida —dijo Sage rascándose la nuca.

Pasarán varios días antes de que los santos despierten. Por otra parte, Yato y Tenma se quedan con el patriarca y es más fácil cuidar de que no se maten cuando duermen.


He aquí el capítulo especial de esta historia y bueno pronto reanudo las novelas 😊

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He aquí el capítulo especial de esta historia y bueno pronto reanudo las novelas 😊

como verán,estoy resubiendo la historia. Les debo un capítulo nuevo, lo sé. 

En fin, pronto lo escribo (estoy complicada con todas las historias que debo escribir :( )

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⏰ Última actualización: May 23, 2018 ⏰

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Saint Seiya: Reencarnación de Athena {Pausada}Donde viven las historias. Descúbrelo ahora