Formalidad

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Sábado por la mañana en el celular de Martín

"Hola! Buendos días, espero hayas descansado"

"Buenos días, si dormí bien aunque aún es algo temprano para mí"

"Lo siento, olvido que no todas las personas madrugan en fin de semana como yo hehe"

"Sí hahahaha pero está bien, no hay problema, siempre puedo dormir de nuevo"

"No es bueno que duermas tanto, te harás perezoso"

"Puedo vivir con ello en fines de semana hehe"

"En fin, quería invitarte a una cita formal... Me gusta que salgamos de ve, en cuando, pero no hemos tenido una cita como se debe y creo que sería buena idea, si tú quieres"

"Mmmm suena bien, sería agradable hacer algo menos espontaneo hehe"

"Genial! Que clase de restaurante te gustaría? Tengo varias opciones pero no sé que prefieras tú"

"No soy muy exigente con esas cosas asi que tu elige, sabrás elegir bien, no soy especial con la comida, solo soy alergico a las almendras"

"Entonces llamaré para hacer reservaciones en un lugar que podría gustarte, de noche es tranquilo y relajante y tienen buenas bebidas"

"Eso suena bien, cuando sería? Puedo los fines de semana sin problema"

"El proximo viernes suena bien? Puedo pasar por ti a tu casa para que tengas tiempo de arreglarte"

"Por mí esta bien, salgo a las 7 y suelo hacer unos 40 minutos... Asi que de las 9 en adelante funciona"

"Perfecto, ahi estaré, después te llamo para confirmarte las cosas"

"Muy bien! Esperaré tu llamada"

"Por ahora me voy, debo seguir trotando, relajate y disfruta tu sábado"

"Lo haré! Corre un poco por mí hehe"
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Y así fue el inicio del sábado de Martín, como aún era temprano se quedó un rato más en cama dormitando y decidió levantarse a preparar algo para desayunar.

Fue al baño a lavarse la cara y refrescarse un poco, vio en el espejo su reflejo, no era el hombre más guapo... Pero tenía su encanto, sus ojos eran café claro y su piel tenía pequeñas pecas que resaltaban con su cabello castaño casi rojizo.

Se secó la cara después de observarse unos segundos y en la cocina encendió la cafetera, necesitaba recargarse, aunque la cafeína no hacía mucho en él pero el sabor era agradable.

Su desayuno era simple y consistia de un poco de fruta, pan tostado, tal vez uno o dos huevos y su amado café, asi que una vez todo listo se fue a la sala a comer mientras ponía las noticias para ver si algo interesante pasaba en el mundo.

Pensaba en cómo es que Ramón se había fijado en alguien como él, solo era un contador regular, su apariencia no destacaba tanto, aunque podría considerarse un twink, al final, era un hombre poco interesante según su propio criterio.

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