~Don't Stop Believing~

Brendon Urie

Brendon era un chico de 19 años, cabello oscuro, estatura mediana y muchos sueños por delante. Su pasatiempo favorito era cantar así que compró una linda guitarra y se encontraba caminando por la ciudad,  de bar en bar con la esperanza de poder presentarse en uno de ellos aunque no tenia mucho éxito hasta que llego a un lugar lúgubre en donde paso a hablar con el gerente de ahí, era un hombre alto un poco robusto y cabello platinado, cuando entraron a su oficina un chico casi de la edad de brendon estaba sirviendo unos vaso de agua en lo que el menor y el gerente charlaban sobre el por que de la "visita" del mismo.
-Y dime, ¿que trae a un hico tan joven por estos rumbos?- dijo el gerente en lo que prendía un cigarrillo.
-Really?- dijo Brendon intentando no reir- es un bar, los chicos de nuestra edad vienen seguido a estos lugares, supongo, no soy mucho de salir con amigos y todo eso- dijo agachando la cabeza un poco nervioso y triste a la vez- pero lo que mas disfruto hacer es cantar y es por lo que estoy aquí, quisiera saber si me dejaria interpretar unas canciones aqui, en su bar- dijo mientras sostenía fuertemente su guitarra.
-no lo se chico, eres demasiado joven y seguro nada talentoso, además......-fue interrumpido por la voz de su hijo que ahora estaría sentado frente a Brendon.
-dejalo que cante una canción al menos, luego tomaras una decisión- dijo bastante tímido
-esta bien- bufo- solo por que tu lo pides.
El menor sonrió y comenzó a tocar una dulce melodía para después acompañarla de su gloriosa voz cantando una linda versión de Careless Whisper.
Cuando término de tocar, el chico alto de cabello revoltoso aplaudió emocionado y trato de convencer a su padre de que lo dejara cantar, al principio el se negó pero después de insitirle tanto acepto.
-Esta bien- dijo cansado de escuchar a su hijo insistir tanto- tocaras 3 días a la semana, no habrá paga, pero puedes quedarte con propinas si es que alguien decide dejarle algo a tu chillona voz- dijo e inmediatamente se alejo de los dos chicos.
-Muchas gracias en verdad por haber echo eso- dijo Brendon emocionado al hijo del gerente.
-No te preocupes, creo que eres muy talentoso y eso que solo he escuchado una pieza- dijo el mayor
-oh muchas gracias- exclamó brendon un poco sonrojado- por cierto soy Brendon- dijo extendiéndole la mano amablemente
-Soy Dallon- le tomo la mano al menor y se despidieron con un abrazo.
Brendon camino feliz a su apartamento ya que, ahora tenía un lugar en donde poder cantar y ser escuchado y un nuevo amigo.
Cuando llego a su departamento se quedo parado frente a su puerta buscando sus llaves cuando su puerta se abrio repentinamente dejando ver a su madre saliendo con un hombre del cual brendon no tenia ni puta idea de quien era pero en el momento no le tomo importancia ya que no quería que uno de los mejores días de su vida fuera arruinado por un pretendiente mas de su madre.
Al final del día Brendon se preparó algo de cenar y se fue a dormir contento ya que al siguiente día tenia su primer "concierto" en aquel descuidado y lúgubre bar.