-¿Dónde está Dazai-san? -preguntó Atsushi mientras lo buscaba con la mirada por toda la Agencia. -Es su fiesta de cumpleaños, no puede perdérsela. -soltó con un poco de tristeza.
-Ya se fue. -contestó Ranpo. -Y no te recomendaría buscarlo, él no es de los que celebran sus cumpleaños precisamente. -revisó la bolsa de papas fritas que estaba comiendo y al ver que estaba completamente vacía la lanzó sin importarle en dónde cayera. -Por cierto, ¿puedes traerme otra rebanada de pastel? Si Dazai no lo quiere entonces yo me encargaré de que no se desperdicie.
Atsushi hizo caso y fue por lo que le habían pedido, aún no estaba del todo convencido de que su superior se marchara de su fiesta pero sí para él estaba bien entonces lo dejaría así.
Mientras tanto, el castaño se encontraba en su departamento leyendo su amado libro sobre las maneras en las que podía suicidarse, o eso hacia hasta que su celular comenzó a sonar.
Sin siquiera leer el nombre de quién le llamaba, contestó e inmediatamente esbozó una sonrisa.
-Chūya. -canturreó. -ya se me había hecho extraño que no me llamaras. Siempre lo haces.
-¡Ja! Ni creas que hablo para felicitarte o algo por el estilo. -soltó con un poco de altanería. -Sólo quería saber qué es lo que sientes al saber que un fracasado como tú sigue con vida después de veintitrés años. Me imagino que debe de ser frustrante.
Dazai rió por lo bajo al escuchar eso, las felicitaciones del pelirrojo siempre eran únicas.
-Vaya que lo es. -decidió seguirle la corriente. -Más cuando cierto enano que parece perchero se encarga de frustrar mis intentos de suicidio.
¡Escúchame bien bastard...-se detuvo, por mucho que le hiciera enojar no podía ser grosero con él, al menos no hoy. -Lamento el no poder estar contigo en estos momentos. -se disculpó sinceramente.
-No te preocupes, trabajo es trabajo ¿no es así? -trató de tranquilizarlo un poco. -Además, cuando regreses podrás compensarlo con un regalo que sólo tú puedes darme. -recalcó aquellas últimas palabras.
Al oír eso Chūya se ruborizó, sabía perfectamente a lo que se refería. Se aclaró la garganta para disimular su vergüenza y río un poco.
-Está bien, está bien. Pero antes debes de prometerme una cosa, jirafa con vendas. -contestó devolviéndole la burla.
-¿Qué sucede?
-Prométeme que el siguiente año festejaremos tu cumpleaños, y el siguiente a ese, y el siguiente después de ese otro y así hasta que nuestro tiempo se acabe.
-Oh pero qué es lo que estoy escuchando, ¿estás preocupado por mi, Chūya? -preguntó feliz por saber lo importante que era para el otro.
-C-Claro que no...-pensó en una excusa rápidamente. -Es sólo que me divierte ver tu cara de frustración año con año por no poder suicidarte. ¡Sí! Sólo eso.
-Oh ya veo, entonces creo que no te dejaré divertirte por mucho tiempo. -amenazó en tono burlón.
-Prométemelo, Dazai.
-Te lo prometo.
-Bien entonces me voy. -iba a cortar la llamada hasta que decidió dejar a un lado su orgullo. -Dazai, feliz cumpleaños.
-Gracias. -respondió con infinita felicidad para después colgar. Pensó en todas las felicitaciones que había recibido ese día y todos los regalos que le habían dado. Le sorprendía el hecho de que tantas personas lo apreciarán y realmente estaba agradecido por eso, pero si pudiera decir cuál había sido el mejor regalo que le habían dado entonces contestaría sin dudar la llamada de Chūya. Porque para él, el simple hecho de poder escuchar la voz de su compañero ya era el más grande regalo que podía recibir.
Oficialmente ya es el cumpleaños de la momia en donde vivo así que por pequeñas coincidencias de la vida, este día está dedicado a él.
Espero y les haya gustado el pequeño detalle aunque igual planeo escribir un One-shot para festejar su cumple, pero eso será después.
Algo más, un pequeño anunció publicitario: para aquellos que siguen mi fic Cartas no enviadas, pasen a leer el último capítulo que publiqué porque estoy segura que no querrán perdérselo, y para aquellos que aún no lo leen ¿por qué no le dan una oportunidad?
Bueno, eso es todo por hoy. Espero y les haya gustado. Si alguien piensa escribir algo por el cumple de Dazai, por favor díganme porque con gusto leería sus historias.
Nuevamente gracias y nos leemos mañana.
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OTP Challenge: 30 Days (Soukoku)
FanfictionJusto como el título lo dice, 30 historias independientes con un tema en específico sobre la relación de Dazai y Chūya. Portada hecha por: @clearspringwater