Trente Sept.

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-¡Jiminnie-Hyung!

Hoseok hizo un mohín con sus labios mientras se encontraba frente al hogar de Jimin, quería sorprenderlo para ir juntos a ensayo.

Pero llevaba más de media hora allí y nadie abría.

Se acercó más y notó un sobrecito metido en la rendija de la puerta.

El papelito con diseños de pingüinos  decía: para Hoseok y YoonGi.

Hoseok no pudo evitar sentirse muy mal cuando leyó el contenido de la carta. Jimin se había ido, aunque había dejado su número de teléfono y nueva dirección por alguna emergencia.

El pelinegro llamó a YoonGi y sus lágrimas cayeron en cuanto el mayor contestó el teléfono.

Ese día, Hoseok sintió que le había causado un dolor muy grande a Jimin. Por eso, sin que YoonGi lo supiera, le entregó la dirección de Jimin a JungKook, porque sabía que él lo quería mucho.

En la carta no decía el motivo por el que se había ido, pero Hoseok en el fondo lo sabía. Y a pesar de la penita en su corazón, no le gustaba la idea de imaginar que hubiese pasado si YoonGi hubiera gustado de Jimin.

Cuando volvía a casa, YoonGi fue a buscarlo a la estación de trenes.

El alto  se inclinó y tomó las mejillas frías de YoonGi, le dio un besito en los labios.

-Hyung, no me abandones nunca. Por favor.

 -' Pasitos de Pingüino ♡ yoonseok '-Donde viven las historias. Descúbrelo ahora