Un Día Común Y Corriente

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Era tranquila mañana de otoño; las hojas amarillentas con tonalidades marrones caían de los frondosos árboles. Se escuchaban fácilmente los cánticos de las aves. Desgraciadamente toda esa paz y tranquilidad suspendidas por culpa del reloj despertador; que además despertó a ambos jóvenes que se encontraban plácidamente dormidos antes de aquel irritante sonido.

Ambos hermanos que a su vez se despertaron con el pie izquierdo, puesto que tendrían que volver a clases. Y algo como la rutina no era de su agrado. Pero que se podría hacer? Tenían infinidad de responsabilidades que cumplir. Mas temprano que tarde por fuera de la habitación se escuchó a la madre pindiedoles que se levantaran. "Steven, Amatista levantense. Hay que ir a la escuela" lo único que se escuchó además de como el reloj despertador caía hacía el fué "ya vamos mamá"

Así que, ambos se cepillaron y sé dieron un pequeño beso como símbolo de "buenos días". Aunque sus padres ya estaban despiertos; sabían de antemano que ambos padres tanto Greg como Rose. Respetaban su privacidad.

Luego de unos cuantos besos, y uno que otro un tanto pícaron. Se dieron una ducha, se vistieron y fueron a la sala a comer su desayuno para retomar las clases nuevamente. Ya en sala se dieron los buenos días con su madre, padre y hermana mayor "Perla"

—Buenos días, mamá y papá —dijeron al unisono, para empezar a devorar sus respectivos desayunos sin piedad.

—Buenos días, hijos —al igual que sus hijos los padres respondieron al unisono.

—Y Perla? —Preguntó Amatista con habiendo terminado su plato con total facilidad.

—Oh, creo que aún sé está bañando, ojalá que no demore mucho. No querrá perderse su primer día de clases —Respondío Rose tomando el plato de su hija e hijo para colocarlos en el lavaplatos.

Ambos se levantaron de la mesa dieron las gracias. Pero antes de irse su madre, tomó a ambos de los hombros y les dijo "no se están olvidando de algo?"  Ambos hermanos solo se limitaron a hacer ruidos en señal de "no sé"

La madre les propició un pequeño beso en la frente de cada uno. Luego les dijo "suerte y que les vaya bien en su primer día de clases". Para cuando ya Steven y Amatista se habían ido. Perla. bueno, Perla a duras penas había salido de su cuarto. Mal vestida, pelo mal peinado y con prisa. Para resumir. Hecha completamente un desastre.

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Ya pasadas algunas calles de distancia con su hogar. Steven y Amatista entrelazaron sus manos. No iban rápido puesto que no tenían prisa y les gustaba disfrutar del momento. Ya por fin llegando al escuela denominada "High school diamond" el día en la escuela ya mencionada, ocurrió con total normalidad. Todos los estudiantes se presentaron uno a uno. Cabe resaltar que tanto Steven como Amatista. Estan en el mismo salón de clases.

La normalidad del día era tanta que inclusive los brabucones de la escuela no molestaban a nadie. Ya a la hora de salida. La parejita tenía la peculiar costumbre de esperar a que la gran mayoría de estudiantes se fueran de la institución. Para irse a solas al baño de hombres o de mujeres o al que mas accesible pareciera. Ya en el baño; en este caso el de hombres, la pareja empezaría a repartirse amor. A mitad de uno de los largos y pícaros besos, hubo una interrupción. Era la madre llamado a Steven a su teléfono celular. La madre preguntaba con angustia "donde están tu y tu hermana, debieron llegar hace 1 hora". Con apresuramiento los hermanos salieron de la escuela como sí no hubiese mañana. Con suerte llegaron en 5 minutos.

Al llegar se encontrarian con Su madre Rose, Su padre Greg y su hermana mayor Perla. Casi todos con una cara de descontento ante la irresponsabilidad de sus hijos y hermanos. Aunque sus padres no solían ser estrictos; esta vez no sería el caso. Ambos padres por igual castigaron y mandaron a sus hijos a su habitación compartida. Pese a que a los "niños" mostraban tristeza e inconformidad. Por dentro sonreían de oreja a oreja, ya que cuando los castigaban nadie entraba ni salía de aquella habitación.

Ya en la habitación. Los chicos comenzaron a besarse desesperadamente, extrañaban los labios de otro. Se aventraron a una de las 2 camas y continuaron así con su festival; mientras se besaban se decían cosas uno al otro como por ejemplo: "no me importa que seamos hermanos", "sí nos separan... No sería capaz de vivir sin tí", "te amo", "eres el amor de mi vida". Y así continuaron toda la noche. Hasta que les dió sueño; se fueron cada uno a su respectiva cama. Pero no sin antes decirse unas muy significativas palabras.

"Te adoro mí pequeña Amatista, duerme bien"

"Te amo tanto, mí querido Steven, duerme bien"

Hermanos (Stevethyst)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora