Mi Lord Y Mi Lady

Cap. 5 "Los Problemas No Se Pueden Predecir"

Escucho sonidos al exterior junto con voces pero no logro descifrarlas, abro lentamente los ojos sintiendo un leve dolor de cabeza.

¿Qué pasó?

Hago un intento de mover mi cabeza pero un dolor en el cuello me lo impide.

¿De dónde vienen estos dolores? No eh echo nada para ganarlos....

Me quejo.

— Hinata!!

Esa es la voz de Valeria?!

— Vale...
-. Intento decir más pero de mi boca no salen más palabras.

— Me escuchas?!

Asiento.

Mi visión es borrosa cosa que no me ayuda a distinguir las siluetas que tengo enfrente mio.

Tengo una sensación horrible en mi cuerpo, cierro los ojos con fuerza y aprieto mi mandíbula.

¿QUÉ ES ESTO MALDITA SEA?! ¡DEJADME EN PAZ!!

Grito con todas mis fuerzas en mi interior y increíblemente el dolor se va.

Respiro rápidamente.

— Calma te, aquí estoy
-. Alguien aprieta mi mano y logró distinguir la voz.

— Dan?
-. Mencionó su nombre con alegría.

Me regala una sonrisa a media.

— Ese soy yo.

— Estas bien? Cómo te sientes?
-. Valeria me satura de preguntas, está muy preocupada.

Estiró mi mano y tocó su brazo, le sonrió.

— Estoy mejor que nunca.

Dan se ríe.

Teniéndolos aquí me relajo y mi visión vuelve a la normalidad junto con mi movilidad.

Por fin puedo moverme bien, ellos dos me ayudan a sentarme en la camilla.

Miro por todos lados observando cada cosa y noto algo...

— Y los demás?

— No te preocupes, tu amiga fue a buscar a sus padres y Drake le acompañó, pronto volverán.

Bajo la vista y arrugó mi entrecejo.

— Le prometí a mis papas que no les causaría problemas y mira lo que eh echo ya, es lo primero que hice.

Dan me mira triste y mira hacia abajo como yo.

— Tranquila, los problemas no se pueden predecir, no es culpa tuya.

Los problemas no se pueden predecir... Ojalá si...

— Hablando de eso, qué pasó??
-. Agrando mis ojos mirando a Valeria.

Ella se aclara la garganta.

— Bueno estábamos hablando tranquilamente y te empecé a ver mal... como mareada, te intente agarrar pero te desmayaste y caíste al suelo, me asuste, intente despertarte pero no lo hacías así que te llevé a la enfermería y fui a buscar a los demás...

Valeria toma aire y me mira.

— La enfermera no podía despertarte... y así estuviste unos minutos hasta ahorita....

Arrugo mi frente procesando todo lo que me ha dicho.

¿Qué diablos me sucedió?

Me rasco la nariz.

— No despertaba? Por qué?
-. Pregunto pero ninguno con los que estoy lo sabe.

Valeria niega con la cabeza, sus manos tiemblan.

—Vale, estás bien?

— No... Voy a afuera a tomar aire, ahora vuelvo....

Asiento.

Su hermano la sigue con la mirada hasta que sale de la habitación.

— Metí la pata verdad?

Dan sonríe negando con la cabeza.

— Eso sí no lo se, pero si te refieres con lo de mi hermana tampoco lo se.

— Gracias genio!

Se ríe.

— Quieres que te traiga un jugo?

Mis ojos se agrandan.

— Por favor.

Dan sale de la habitación dándome un último vistazo.

— Vaya lío que eh echo.

Y ahí estoy yo, sola en una habitación, sentada en una camilla intentando saber que diablos me ha pasado.

                                           ***

— Camina lentamente, si?

Asiento.

— Te duele algo?

Niego con la cabeza.

— Si quieres puedo llamar al...
-. La interrumpó con la mirada.

— Que estoy bien! Solo me eh desmayado!!

Los papás de Aiko están hablando con mis papás y eso me pone de nervios, Valeria me está llevando a mi habitación pero...

— Estoy perfectamente bien, no te preocupes!

— Lo siento...

— Valeria gracias, pero estoy bien, mira!!
-. Me pongo enfrente de ella y empiezo a hacer movimientos algo bruscos.

Ella agranda los ojos.

— No te duele?

— No, ya escuchaste al doctor que me desmaye porque no desayune.

Ayer Dan me contó que cuando pasan estas cosas su hermana se pone algo paranoica, nerviosa y muy preocupada, consecuencia del incidente de su hermano Ángel.

Le sonrió y ella me la devuelve.

— Okey, luego nos vemos!

— Bye!!

Ella se retira y yo entro en mi habitación, respiro profundamente, siento mi cuerpo pesado así que me tumbó en mi cama.

Se supone que vine a divertirnos.
— Dónde estará mi diario?
-. Lo busco con la mirada y lo veo en la mesa central de la habitación.

Ahí estás.

Me levanto, lo tomo e empiezo a escribir todo lo que me ha pasado últimamente.

Me fascina la sensación de cuando la pluma toca y traza líneas en el papel, es un sentimiento relajante.

Sonrió.

Y ahí en mi habitación con mi diario en mis manos plasmó todo y cada cosa que recuerdo. 💙

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Hola!!
Hace mucho que no publicaba por aquí, pero hace unos días me llegó la inspiración 😄😉

Y bueno, espero que les haya gustado este capítulo :'3

Bye 💜