Narra Vegetta
Aquella mañana amanecí mucho mejor de lo habitual.
Me levanté pensando en los videos del día anterior, me lo pasé muy bien grabando Planeta Vegetta y Apocalipsis Minecraft con Willy. Si, Willy. Ese chico es estupendo. Es como mi hermano pequeño, siempre tengo que estar al tanto de sus actos.
Después de pensar en todo aquello, cogí mi teléfono móvil y me fui a desayunar.
Como todos los días, preparé mi taza de leche junto al tazón de cereales y le dí los buenos días a mis suscriptores.
Ese día estaba increiblemente feliz.
Ya habiendo desayunado, me puse a grabar algo de Battlefield, ya que lo tenía un poco descuidado. Cuando estaba a punto de comenzar a decir mi frase me llamaron por teléfono. Era Willy. No sabía porqué pero se me aceleró el pulso al ver que era él. Cierto es que ultimamente siento cosas distintas por Guillermo, estoy más feliz cuando grabo con él. Me hace muy feliz ese pringao. Demasiado feliz diría yo.
Cogí el teléfono, y al escuchar su voz, esa hermosa voz, sonreí simultaneamente.
-¡Que hay Vegetta! -dijo Willy con voz alegre-
-Muy buenas señor Willyrex.
-¿Te apetece quedar?, para hablar y eso... -en ese momento la voz de Willy se empezó a volver temblorosa y yo me estaba poniendo nervioso-.
-Va... Vale Willy. ¿Dónde quedamos?
-¿En El Retiro a las 6 te parece bien?
-De acuerdo, allí nos vemos.
-Hasta luego Vegettita.
¿Willy me llamó "Vegettita"? El corazón me dio un vuelco. Me empecé a sonrojar mucho. Quería verle, quería sentirle, quería besarle... ¡ESPERA! ¿Quería besar a Willy? No, yo no soy de ese tipo de chicos. O sí. No, eso es imposible. A mi me gustan las mujeres, aunque llevo unos años que no me atraía ninguna mujer por muy guapa que fuese. Alomejor me estaba enamorando de Willy... Alomejor...
Estaba caminando hacia El Retiro después de coger un autobús que me dejaba cerca del mismo. Vi a Willy a lo lejos.
Narra Willy.
Desperté sobresaltado, con ganas de vomitar y lágrimas en los ojos. Había soñado con Vegetta. Era un sueño normal. Samuel, ese chico tan guapo y muculoso... ¡Espera! No,no,no... No me puedo enamorar de Vegetta, yo estoy enamorado.. de... de Alex...
Bueno, me fui a preparar el desayuno para llevarmelo a la habitación y ver un directo de SMITE como hacía todos los días. No me dí cuenta y estube hora y media desayunando y viendo el directo. No tenía tiempo para preparar "El gran Bill" ni ninguna otra serie, ya grabaría esa tarde. Preparé un par de videos para emergencias y llamé a Vegetta, por si quería quedar para hablar y decirle que soy... ejem... que soy... Homosexual.
No sabía como iba a reaccionar, ¿se lo tomaría bien? ¿dejaría de hablar conmigo?
Tenía que hacerlo. Es como un hermano.
Le llamé, tardó un poco en cogerlo pero al final atendió la llamada:
-¡Que hay Vegetta! -dije alegre-
-Muy buenas señor Willyrex. -Adoro cuando me llama así-
-¿Te apetece quedar?, para hablar y eso... -en ese instante mi voz comenzó a temblar-.
-Va... Vale Willy. ¿Dónde quedamos?
-¿En El Retiro a las 6 te parece bien? -en un parque, perfecto, y no hay ninguno mejor que El Retiro-
-De acuerdo, allí nos vemos.
-Hasta luego Vegettita.
Sé que a Vegetta le ruboriza que le llamen así, por eso siempre que puedo se lo llamo. Me gusta verle sonrojado.
Comencé a preparar videos que grabé el día anterior para que se grabaran mientras yo no estaba en casa, además me dí una pequeña ducha para despejarme y estar más tranquilo a la hora de hablar con Vegetta de mi homosexualidad. Me vestí con una sudadera de Jack and Jones, unos pantalones negros de la misma marca y unas zapatillas Nike negras y blancas. Iba elegante, pero informal. Ese es mi estilo.
Cogí el metro y me dejó en frente del Retiro. Estube esperando 10 minutos a Vegetta, pues el vivía más lejos. Le vi venir a lo lejos y se me aceleró el pulso.