Sé que has escuchado esta historia un millón de veces, pero puedo decirte que ninguna cuenta toda la verdad, hay tantos detalles que se omiten. Para tu suerte yo estuve presente. Prepárate y escucha atentamente porque no podré repetirla, ya que mi verdugo no tardará en llegar. Puede que en un comienzo no entiendas de lo que hablo, pero de a poco todas las piezas encajaran.
Era el año 3045 cuando el mundo quedo bajo la oscuridad, el sol ya no aparecía y las estrellas nos habían abandonado. Como supondrás la ciudad entro en caos y el pánico se colaba en las casas como una ráfaga de viento, los lideres sucumbieron bajo el pueblo, quienes pusieron en el poder a un tal "Rey", que no era más que la marioneta de un selecto grupo de personas.
Por fuera pareciera que todo estaba bien, podías incluso decir que era un día normal, pero si te acercabas podías ver el miedo impregnado en cada uno de los rostros. Te despertabas y acostabas pensando que en cualquier momento podrías desaparecer, como ya miles de personas lo habían hecho, nadie sabía que les pasaba ni a donde iban, solo se esfumaban sin dejar rastro de su existencia. Podías escuchar en la calle a mujeres conversando acerca de que tal vez los que quedaban en la tierra eran pobres almas que algún Dios había olvidado, que los alienígenas habían comenzado a hacer experimentos con humanos y varias invenciones más.
Cuando todo esto sucedió, yo tenía tu edad, por lo que no estaba muy al tanto de lo que sucedía a mi al rededor, escuchaba a los adultos discutir a cerca del tiempo, pero no entendía porque hablaban del reloj si este funcionaba bien. Pasaron unos meses así, ya casi no se veían niños, todos se habían ido.
Un día como a las 3:09 de la mañana llegó mi padre gritando que nos vistiéramos y tomáramos lo esencial, que teníamos que irnos rápido porque las fuerzas del "Rey" lo habían descubierto. Tomé un poco de ropa, algunas viejas fotografías de la familia y una libreta. Salimos por la puerta de atrás de la casa, donde nos esperaban otras dos familias más, no los conocía pero mis padres sí. No avanzamos mucho cuando se comenzaron a escuchar disparos detrás de nosotros y unos gritos que parecían provenir del mismo infierno. Comenzamos a correr por un bosque como nunca alguien lo había echo, mis piernas no eran tan rápida como las del resto, me estaba quedando atrás llegando al punto de que debido a la oscuridad ya no podía ver a mi familia, pensé que era mi perdición, cerré los ojos para así no sentir cuando el inminente disparo me matará, pero no sucedió nada seguía con vida y con aún con cierta incredulidad abrí despacio los ojos para mi gran sorpresa había un sol radiante en el cielo y sus rayos calentaban mi piel, no lo podía creer seguía en el bosque pero todo era diferente, avancé buscando mi familia y de un segundo a otro volví al oscuro bosque. Los hombres adultos estaban a mi alrededor discutiendo acerca de mi situación de infectada, hablaban en clave pero pude entender que yo y algunos niños cuando nacimos se nos inyecto un extraño virus que desarrollaron unos científicos que nos permitía viajar en el tiempo, tanto al futuro como al pasado, lamentablemente no ha voluntad, lo que era el mayor problema, dijeron que yo podría ser de gran ayuda ya que el resto de niños con el virus habían sido capturados por el ejercito del "Rey" para realizar experimentos y colocar el virus en adultos fácilmente manipulables por una serie de terapias donde literalmente se volverían zombies dispuestos a hacer todo lo que se les diga y que con el virus extraído de los niños, podrían viajar por el tiempo y así el misterioso y selecto grupo de personas dominarían tanto presente, pasado y futuro.
Detrás de los hombres, pude divisar a mi madre asustada por lo que me esperaba, y su lado mi padre quién tenía una especie de collar en su mano y que luego de la señal de uno de los hombres se lo entregó y él lo puso en mi cuello. Volví al bosque soleado y con brisa de otoño y de nuevo al bosque oscuro.
El collar permitía que controlara los viajes o por lo menos el tiempo que permaneciera en otra época, fue así como comenzaron mis viajes, el resto de la historia ya es predecible.
Ahora te preguntarás que tienes que ver tú con todo esto, bueno ....tú también tienes el virus, por lo que debes estar preparado. Preocúpate si un día al despertar no está el sol y mucho más si las estrellas se esconden. porque el peligro está cerca.
El verdugo ya está en la puerta.
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Algunos cuentos cortos
Short StorySon varios cuentos cortos, algunos pensamientos, algunas ideas sin final, un poco de todo, pero que al igual que las piedras, juntas hacen un montaña de piedras :)