Las Máscara de Animal

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Tiempo Presente

No había podido concretarme en la reunión del todo después de toparme con "Ella".
La imagen de verla así de destrozada tanto mental como físicamente rondaba por mi cabeza.
Cuando chocó conmigo sentí el dolor que emanaba su alma.
Además de su rencor por supuesto.

Pero, ¿Como no notarlo?...
Su hermano abría muerto en parte por mi culpa y yo solo estuve allí inexpresivo en el funeral.

-¡Hey chico gay, falta tu voto!- Natalia me despertó de mi letargo.

Ella estaba en lo cierto, yo estaba distraído.
Había olvidado que asistía a la reunión para la elección del jefe del nuevo segmento primicia de la Empresa: TG

-Ah... - sonreí fingiendo como si me simpatisara el comentario mal intencionado de Natalia.- Pues voto por ti. Eres la perfecta ¿no?

Mi comentario alagó y a la vez ofendió a la chiquilla. Era obvio que era sarcasmo, pero de cierta forma lo dije con un miligramo de cariño. Puesto que sus ojos señalaban algun recuerdo lujurioso del pasado...

Hace unos meses

Ojeo las notificaciones y mensajes de Amino en una fría noche donde la lluvia había arruinado mis planes de jugar basketball.
Acostado en mi cama con el celular en mis mano me llega un mensaje.
La autora del mismo se llama: KripieKookie.

Su nombre real es Serena.
Ella es una de mis mejores amigas en toda la cuidad. Hasta podría decir que es más que eso...
Concidencialmente nos hicimos amigos por un blog sobre K-pop. Ella me agregó y yo me volví su amigo más cercano.
Dias más tarde intercambiamos datos. Irónicamente ella vivía a unas cuadras de mi hogar.
Quién dirá que esa ligera coincidencia abríria un fuego intenso en cada uno de nuestros cuerpos...

Al día siguiente planeamos salir, yo tomé prestado el auto de la casa y fui a verla.
Ella estaba radiante, su ropa no era para nada formal a pesar de que decidimos ir a un bar.
Sus ojos irradiaban felicidad y misterio.
Ella sólo usaba una chaqueta y unos jeans. Su cabello era un desastre, un desastre demasiado provocador...
-- Es un gusto ver a la chiquilla de Amino en persona- Me estacioné frente a ella y baje del auto.

Ella huele bien, demasiado. Apenas bajó y el aroma invade mis sentidos, una llama empieza fluir en mi pecho. No puedo evitar supervisar con la mirada su vientre bajo, no puedo controlar mi mirada. Esos jeans le quedan al dedo...

-Es un gusto verte de nuevo. Feli- Ella me sonrió.
Así me llamaba Serena desde que nos conocimos, era un apodo cariñoso.

Salimos juntos, fuimos a un bar cercano, Allí ella me negó un par de bebidas.
Ella ordenó algo dulce en una copa transparente,el líquido era dulce y burbujeante...
No. No era champán, era tan solo gaseosa: Sprite.

La misma que más tarde con algo de alcohol encima definirá como "su droga"
Esa noche no me molesté en preguntarle el porqué de sus palabras, ambos con alcohol en la sangre y euforia en el corazón no dudamos en soltar la sopa.
Ella era mucho menor que yo, compartimos ideologías, pensamientos,gustos por el anime, kpop, filosofías de vida.

¡TODO!

Compaginabamos en casi todo, ella era simplemente perfecta.
Yo ya lo había decidido. La quería para mi.

Los tragos y el Sprite iban y venian.

Sin darnos cuenta los juegos de palabras sexuales que nos hacíamos al inicio de los tragos, se transformaron en bromas sexuales físicas, chistes muy subidos de tono, nuestras manos rozaban frecuentemente la intimidad del otro por debajo de la mesa...
Pero aún era temprano todavía.
Con la respiración agitada saqué mi celular para ver la hora, apenas son las 9:30 pm luego acaricié su cabello, su espalda y muchas cosas más...
Ya no podíamos más.
Subimos a mi auto, conduje con locura a mi apartamento.
Abrimos la puerta y la lujuria se liberó entre ambos como un globo de agua lleno al tope.
Me enfoqué en darle el placer en base a mis conocimientos. Yo no era un novato, y no fallaría en darle el placer a la chica de mis sueños.
Ella me beso, yo también la besé...
Aun así bese más que sus labios.
Sus curvas me volvieron loco, sus pechos, su cabello, sus ojos y su vértice no se salvaron de mis dedos y labios. Me volvió un animal sexual.
Ella me correspondió de igual forma, estaba consciente y su franqueza de sus movimientos pelvicos la delató.
Ambos llegamos al clímax, pero la explosión de expresiones corporales no paro hasta la madrugada...

Si, lo habíamos echo...
Hice el amor con Serena.

Esa mujer es simplemente el cielo.
¿O No?

¿Acaso sigues pensando que soy alguien "bueno "?

Huellas de un ZorroDonde viven las historias. Descúbrelo ahora