Capítulo 11

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Mi mente estaba en blanco, no sabía que pensar, ni que decirle.

-Salir?...- hice una pausa, en la que el me observó impaciente- si ya estamos afuera kaleb.

Este sonrió pesadamente, me tomo de la mano delicadamente, se acercó a mi oído y con un susurro que erizo la piel de cada centímetro de mi cuerpo, dijo:

- Quiero tener un cita contigo.

No respondí, me quede petrificada por aquella sensación. ¿Como un simple susurro lograba esto?

-Tomare tu silencio como un si- beso mi mejilla y se alejo hacia su auto.

Seguía parada ahí, en medio del porche se mi casa, me vi a mi misma sonriendo pasando mi mano por la mejilla que acababa de besar. Es como si me hubieran puesto en pausa y todo a mi alrededor siguiera continuando.

-Danielle!!! ¿DONDE DEMONIOS ESTABAS?

Oh, oh... Ese grito fue una patada directo a la realidad, mi madre estaba en la puerta, hecha una furia. No entiendo porqué se ponía asi si sabia que estaba con Emma, al menos que... Oh demonios mamá estaba espiando. Camine hacia ella.

-Mamá relajate, estaba con Emma- puse mi cara mas inocente, muchas veces funcionaba.

-Ningun "estaba con Emma"- dijo imitando mi voz, aguante la risa- quien era ese chico?

Y esa misma pregunta me hacia yo desde que lo conocí. ¿Quien era ese chico? El como llego a mi fue tan repentino y a la vez refrescante, si y no solo por el hecho de que me haya lanzado en una piscina. Pero es que me ha hecho sentir... no se muy bien que palabra podria describirlo, pero es una sensacion que no sentía desde que mi padre falleció. Eso es lo refrescante.

-Solo un amigo- mire la cara dudativa de mi madre y no dude en darle mas explicación- anoche se nos hizo tarde, y sabes que a la madre de Emma no le gusta que conduzca tan tarde, por eso me dijo que me quedara a dormir. Esta mañana salimos a desayunar al cafe Mosse y nos encontramos a unos amigos, a Emma se le presento algo y no podia traerme, por eso el me trajo- Hable y me sorprendió lo calmada que salian las palabras de mi boca.

-Esta bien, pero que no se repita. Estaba preocupada, podrias al menos avisarme, para eso existe la tecnología hoy en dia hija.

-Claro claro, la mama moderna hablo- dije poniendo los ojos en blanco, esta orgullosa se fue a la cocina.

Me encontraba llegando tarde a clases, super normal en mi. Mientras caminaba por los pasillos percibí una discusión entre dos voces que conocía muy bien. Luke y Emma se encontraban peleando, seguro es por alguna tonta pelicula, mientras me acercaba a ellos puede escuchar mejor, y realmente no me lo creia.

-Emma sabes que no lo soporto, por qué lo haces tan dificil- dijo mi amigo cabizbajo. Esta se quedo unos segundos mirandolo.
- Me lo estas poniendo dificil Luke, no quiero que esto sea incomodo para ninguno. No quiero que te alejes de nosotras...

- Pero no aguanto- la interrumpió- no aguanto verte con él.

-Y yo que? Sabes cuantas veces tuve que ver como coqueteabas con otras chicas?- Luke la miro sorprendido- y ahora que por fin el chico que me gusta esta conmigo, es que tu te das cuenta de lo que sientes por mi? Dejame ser feliz, asi como yo te deje ser feliz con otras chicas- su voz estaba entrecortada, luke intento tomarla por el hombro pero esta se apartó.

-Emm, por favor.

-No Luke, basta! Quiero que sepas algo, eres mi mejor amigo y siempre lo vas a ser, pero en este momento lo mejor es que me des espacio, será lo mejor para ambos.

Y asi fue como mi querida amiga dio su sentencia, lo envio directo a la friendzone, pero era algo necesario. Ella lo espero mucho, espero que el se diera cuenta de lo que ella sentia, aun recuerdo que hasta hace un año ella estaba enamorada de él, pero el no la veia asi, o no hasta ahora. Realmente no me habia dado cuenta de que esto estaba pasando, ahora todo tiene sentido, desde aquella fiesta Luke habia estado actuando muy diferente, distante... Es mi mejor amigo y todo, pero se ha comportado como un imbécil, ¿ahora que la chica consiguio a alguien se da cuenta de lo que siente? Me siento mal por ambos, se que se quieren mucho, hemos sido mejores amigos por mucho tiempo y ella estuvo enamorada de el por mucho, y ahora que ella supero esa etapa, el siente algo mas por ella.

-Bonito espectaculo, no?- dijo una chica atras de mi. ¿Y esta cuando llego?

-Mmm quien eres?-le pregunte.

La chica me analizó, mirandome de arriba hasta abajo. Era un poco mas pequeña que yo, con un cabello ondulado y color negro hasta sus hombros, tenia esa mirada que esconde algo, llevaba un atuendo un tanto raro y ridiculo.

- Solo una observadora- respondio con un tono de voz un poco siniestro, lo cual me causo un poco de temor y se fue.

Camine por los solitarios pasillos del instituto en dirección al patio, una vez alli me recoste bajo la sombra de un arbol. Ya no tenia caso que fuera a la clase, de cualquier forma no me dejarian entrar. Me coloque los audífonos y me deje llevar por la melodia del cello y el piano. Tras un par de piezas, una sensación extraña invadio mi cuerpo, ¿como cuando sientes que alguien te observa?

Lentamente abri los ojos para encontrarme con unos verde oliva observarme con cierta picardia. Se trataba nada mas y nada menos que de Doms. Nicholas Doms, un año mayor que yo, es un chico seductor, egoista y mujeriego, aunque hay algo de el que siempre me ha intrigado, el misterio que guarda.

-Clare? Tu fuera de clases?- finje sorpresa.

-Doms, te preguntaría lo mismo, pero me sorprenderia mas verte en clases- dije con un poco de ironía.

-Vamos nena, te sorprenderias de otras cosas- una sonrisa ladina se asomo por sus labios.

-Oh creeme, nada de lo que hagas me sorprenderia, eres tan predecible- la verdad es que era todo menos predecible, pero tal vez diciendo eso bajaría un poco de esa nube.

Vi como se sentaba junto a mi, tomando la misma posición que yo, pasó un brazo debajo de su nuca y cerro los ojos.

-No sabes mentir Clare, nunca lo haz hecho bien.

-Tu debes saber muy bien de eso, no?- dije con una sonrisa forzada, este fruncio el ceño- vamos Doms, le mientes muy bien a las chicas.

-Ooh, eso si que fue un golpe bajo- puso su mano en su regazo y hizo una mueca de dolor.

Iba a pararme, hablar mucho con el no era bueno. Pero una mano me detuvo, voltee la mirada y su mano tomaba la mia con un poco de fuerza.

-Aun quedan 20 minutos para la proxima clase, quedate- dijo como especie de suplica, lo pense un par de segundo, y este no dudo es jalarme hacia él.

-Esta bien, pero no te quiero escuchar. Tu estaras ahi- señalé su lugar-callado y yo aqui haciendo lo que hacia antes de que llegaras a interrumpir.

-Me parece bien, pero me daras uno de los audífonos para escuchar contigo.

Y asi es como pase los 20 minutos mas extraños de mi dia, con un Doms totalmente quieto y sin sus intentos de seducción.

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⏰ Última actualización: Jul 09, 2017 ⏰

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