Seconds

Caída libre.

Era una oscura noche, fría, emocionante, intensa. Observaba la ciudad desde la azotea de uno de los edificios mas solitarios, ya que el edificio de  al lado le robaba todo su esplendor. Estaba expectante de esta misión desde que recibí una carta con la información y que era supuestamente bastante difícil, que tenía que ser cuidadosa, meticulosa, estratégica, y sobre todo ser como siempre, como la fría, inteligente, e impredecible yo. Porque tanto lío por algo que ya se sabía? Siempre fui la mejor, entonces, porque preocuparse tanto? Era clase élite, con eso sería suficiente.
Generalmente me asignaban misiones de de los rangos:
X= Misiones más importantes
Z= Misiones importantes y largas (desde 1 mes hasta 1 año o incluso más)
H= Misiones importantes cortas (desde 1 hora hasta 1 semana o más)
Y, no pueden faltar las misiones rango 11, las misiones más importantes, mis misiones, destinadas a ser completadas por mí, pero claro,eran misiones confidenciales.

Me habian asignado la mayoría de las misiones de esos rangos, incluso una "z", tuve que seguir e investigar a un tipo, simplemente por intuición de mi jefe, pero era hábil, y se mezclaba entra la multitud con facilidad, se me perdió unas cuantas veces, y tenía la sospecha de que alguien mas lo seguía, y pues, le saqué toda la información y luego lo maté, además, la misión se extendió por 6 meses, por lo que terminó durando 1 año, 7 meses, 4 días, 7 horas, 34 minutos y 5 segundos, aunque no estoy segura si fueron 8 segundos, ya que arrancar un corazón o romper un cuello me toma 3 segundos, pero éste me golpeó entonces tardé 5.

Me enojé un poco porque la misión se habia extendido demasiado, ¡yo también tenía una vida!, Solo que la vivía en mi centro de entrenamiento brutal, pero me alegraba que siempre fuera la primera opción, y obviamente la mejor opción. Volviendo a la azotea, miré mi reloj; (obsequio de mi cumpleaños número 17, hace algunos meses; era un reloj de la tecnología mas avanzada, y que por supuesto lo tuve que modificar, ke agregué algunas cosas que encontré en el mercado negro, para ser exactos: cuatro mini proyectiles, gas lacrimógeno clase 3, un porta dagas y un rastreador, no es que el reloj en sí fuera inútil, venía equipado con: holograma, sensor de movimiento de personas específicas con radio de 10 metros, celular, localizador y una especie de máquina que leía mis signos vitales solo con presionar un boton); eran ya las 20:17, ya era hora.

Dirigí mi mirada hacia el edificio que se encontraba frente a mí; era un majestuoso edificio, unos pisos mas bajo que en el que yo me encontraba. A unas calles de éste fue donde tuve que dejar casi malheridos, CASI, dije, solo les rompí la nariz... Y las piernas, pero en mi defensa estaban ofendiéndome y además, fue casualidad habérmelos encontrado, me decían que parara, y eso es una ofensa en mi diccionario.

Ese edificio fue construido con el propósito de ser lugar para las fiestas mas caras y para las personas que tienen mas lujos; y ahí estaba él, en una de las fiestas mas importantes del año (para no decir que era la fiesta en donde se gastaba más dinero, prácticamente 10 millones de dólares, uff, la gente si que no evolucionó, desde que crearon la máquina de clonación, clonaron a personas demasiado antiguas para poder pensar en otras personas que no fueran ellos mismos.)
Dándose el lujo de comer 100 dolares en cada bocado. Se supone que era uno de los mejores agentes, pero eso solo lo decidía yo. Y creía que podría conmigo? Hasta me provocaba risa, nadie nunca pudo conmigo, y jamas lo harán.

Me levanté de el frío suelo y di un pequeño salto para bajar de la torre en la que me encontraba, Slaigerd era una ciudad hermosa, solo para aquellos que podían entender su belleza. Me acerqué al borde de la azotea y puse un pie en el pequeño muro que lo rodeaba, me paré sobre él y di un último vistazo al edificio, me di la vuelta. Escondí un mechón de mi cabello blanco detrás de mi oreja y me coloqué la capucha, escondiendo cualquier rastro de mi cara. Una sonrisa se pintó en mi rostro.
—Esto va a ser divertido— dije en un susurro para mí misma.

Y me deje caer. Todo iba en cámara lenta. Sentí como mi espada cortaba el aire hasta que llegué al piso número 17, donde se celebraba la famosa fiesta. El tiempo prácticamente se detuvo, con las milésimas de segundo convirtiéndose en horas, cuando mi mirada se cruzó con la de él, cuando mis ojos color luna pudieron observar sus ojos color mar hubo algo completamente inesperado, pero esa sorpresa solo duró 3 milésimas de segundo, antes de que en mi rostro reinara una sonrisa casi diabólica, y mis labios enviaran un mensaje:

                "Nos veremos pronto"

Y con eso desaparecí, notando que sí había captado mi mensaje, porque se asomó por el balcón situado a la par de el enorme ventanal.

Deje una pequeña pista, que cualquiera podría saber lo que significaba: destrucción.

Aunque no fuese totalmente cierto.

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Hola! Pues, aquí esta el primer capítulo de seconds. Esta es mi primera novela, si ven algún error, o tienen alguna sugerencia, porfavor comentenla... sí, parece una palabra. Y pueeees, nada, espero que les guste y trataré de actualizar mas seguido. Y también trataré de hacerlos más largos.

Les deseo que les llueva pizza! Byeee