Talking To The Moon- Niall Horan

Capítulo 16

The Fray resonaba en mis oídos, Never say Never era una de mis canciones favoritas de ellos, los audifonos eran cómodos, pero después de usarlos por tres horas ya me estaban cansando. Me quité los audifonos y me quedé mirando el blanco techo de mi cuarto en la clínica, eran las siete de la noche, mi madre se había Ido a las cuatro para visitar a la abuela y Louis tuvo que quedarse a estudiar en la biblioteca pues mañana tiene un examen sorpresa, se enteró porque descubrió al maestro imprimiéndolos. 

-Buena menuda vida que llevó- dije aun mirando el techo. La luna se asomó por mi ventana y yo me paré para abrirla- Amiga luna, ___ está aquí ¿la has mandado tú? No me puedo amar, no me conoce, sé que tiene sentimientos hacia mí, pero tengo miedo de que no sean lo suficientemente fuertes como para que viva con ésta vida que llevó 

Como siempre la luna se quedó callada, siempre callada, escuchando atenta, era mi amiga, porque era hermosa 

-Ojalá supiera que piensa ___, que pasa por su cabeza, vaya, sería grandioso- Oí unos golpes en la puerta- pase- dije con la voz tranquila sin dejar de ver mi ventana

-Oye culo grande ¿ya acabaste de estudiar? ¿Vamos a cenar? Me muero de hambre Me levanté de la cama, pero en vez de encontrarme con Louis me encontré con una ___ con los ojos húmedos y cabello enmarañado 

-___- Mi voz tembló -¿Estas bien? 

Ella soltó una ligera carcajada sarcástica al aire 

-Horan, estoy en un país lejos de mi hogar buscando a mi tía en una clínica psiquiátrica después de haber tenido un ataque de nervios por tu culpa y te encuentro aquí 

Me quede callado, ella no estaba aquí por mí, estaba aquí porque necesitaba a su tía 

-Está bien, no hables, lo prefiero así. Solo venía a…- su voz se apagó poco a poco, algo me decía que no había pensado en esa parte al momento de caminar hasta mi habitación 

-¿A buscar a tu tía? – Sugerí, me senté de nuevo en la cama dándole la espalda- Ella está en el nivel dos, izquierda, derecha, izquierda, hasta el final del pasillo y ahí está el consultorio de la doctora Eaton 

Hubo otro silencio de nuevo, ___ no se había ido, solo había cerrado la puerta y ella había entrado en el cuarto. Estaba parada junto a la puerta, con lágrimas corriéndole por las mejillas, sentí unas ganas enormes de protegerla de cualquier cosa que le hiciera daño, ¿Pero cómo protegerla de mí mismo? ¿Cómo podía un loco proteger a alguien? 

-Oye ___- Me levante y la rodee con mis brazos, la protegería aunque fuera yo mismo un peligro –Yo… también te necesito pero… 

-¿Pero? 

-Pero ¿Cómo se pueden necesitar dos personas que no se conocen? 

-No lo sé, pero sé que esto va más allá de lo superficial

Nos sentamos en la cama mirando hacia la ventana con las manos entrelazadas 

-Ed día que te conocí- empezó ___ - Era el aniversario número cinco de la muerte de mis padres. Siempre habían sido días grises, me quería morir cada vez que llegaba uno y bueno eso no fue la excepción, amaba la clase de filosofía, pero en ese momento preferí perderme en mi libro, luego entraste tú, con tus ojos azules y tu rubia cabellera, Horan te juro que fuiste el rayo de luz que alegro mi día, cuando nos sacaron del salón fue un alivio, por cierto, lamento haber sido brusca contigo al principio, pero no sé cómo actuar delante de un chico tan guapo 

Mire a ___ quien estaba roja de vergüenza al igual que yo 

-Cuando me confesaste- continuo ___- lo de… tu problema, no supe cómo actuar, no sabía cómo ayudarte, y tú te fuiste. Tal vez fue lo mejor, necesitaba pensar en aquello, no era un juego, y tuve miedo, miedo de…