Capitulo 24: Quimera

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-¿Carter? -Me llamo y manifesté un sonido de asentimiento -¿Tu excusa se trata de algo... O alguien? -Su sonrisa me inquirió

-No existe una razón; Disculpamé, pero me tengo que ir -

-¿Y esa repentina formalidad? -Me vacilo.
En algún momento los protagónicos se cambiaron, yo me mostraba una actitud enigmática y el se reía de ello

-Te diré algo, simplemente olvídalo -Me di la vuelta para irme, chocando con alguna desafortunada persona -¿Presta atención in... - Me abstuve de continuar al repararme

-Digo lo mismo digo -La sonrisa con coquetería y un suspiro de frustración de mi parte dejo en evidencia que el estrés comenzaba a destilarsé en mi. No por la presencia de la recién llegada, sino por la multitud que eramos y... El tema anterior

-Ahora no tengo tiempo Jessica -La eludí subiendo varios pisos antes de el inicio de clases

La soledad atrajo mi análisis de la situación actual y la mas turbia era que Raquel, sabia de mi, demasiado y no dudaría que supiera con que estoy relacionado. Sin mencionar que se delata a si misma al evitarme... Al igual que yo.
El timbre me aparto bruscamente de mis pensamientos.
Descendí con sigilo hasta mi aula, sin la atención de nadie; me sitúe en el fondo de la clase con Sebastián

-¿Donde...? -Lo irrumpí con mi respuesta

-En la azotea -Lo susurré ya que el docente estaba en el lugar y el asentimiento del ojigris fue suficiente

El receso fue indicado y no me perdería ser el primero en abandonar la actual tortura, aun que fui detenido por Sebastián, que coloco una mano en mi hombro.

-Necesito hablar contigo -La seriedad se propago en ese comentario

-¿Debería temerte? -Conteste con socarronería, negó con la cabeza, acto que recuerdo desde los inicios de mi adolecencia -Bien, te veré en la cafetería tengo... Que resolver algo -Mentí; claro que mi vida no se basaba en una ocupada agenda.
En mi camino al patio note a Raquel a la distancia, con mi intención de evitarla, me escondí detrás de una de las paredes mas cercanas y la observe meticuloso para que no me distinguiera

-Muy creíble Carter; sabes que no es nada moral espiar a las personas -Una voz a mi espalda que se ocupaba de ser mi conciencia personificada provoco mi sobresalto

-¡Demonios! -Gruñí, molesto por la sorpresa -Te mencione donde nos veríamos -

-Sí; no obstante, no tenia hambre, si querías vigilar a...- Investigó con su mirada el entorno -... Raquel - Levanto una ceja

-Mi intención no era esa; quería rehusarme a congeniar con ella -Aclare con una vacía esperanza de que lo creyera, sintiéndome la vergüenza en mi rostro por sus suposiciones.

-Creo que... confundes ambos significados ¿Por que te sonrojas? -

-Te equivocas -Fruncí el ceño, chasqueando la lengua

-Acerca de el tema que quería tratar; no se si lo olvidaste, lo que es muy posible pero te lo recordaré nuevamente -El bullicio estudiantil se fue opacando por mi interés guiado a el y su silencio misterioso, por razonar sus futuras palabras.

-Cuando quieras -Manifesté curioso por el porte riguroso que adoptó

-La causa por la que decidimos realizar el equipo con Raquel en el evento -

-Lo recuerdo... Lo que olvide fue el motivo -Retuvé una sonrisa burlona, presionando mis labios y el entorno los ojos

-¿Abordar el asunto de su pasado? -Me silencie, fiel a mi promesa, aun que sonara estúpido, me eran de gran relevancia los juramentos -¿Lo hizo? -Insistió y me negué a responder -Si, Lo hizo. Tienes que... -Interrumpí su próxima exclamación

1° El Inicio De Los Elementales [Editada]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora