Ignar Corazón del Cuarto Eón

El joven de las colinas de Din

 El estado de din era una pequeña región en el estado de Ignar el cual estaba gobernado por el rey Hans y la reina Liv y sus dos hijos herederos de todas sus tierras la princesa Amalur y el principe Eiden el joven heredero de la corona de su padre, la pequeña provincia de din estaba al cargo del príncipe Eiden, esta tierra tenia a los estados vecinos de Sapidus al noreste y Veritatis al noroeste el estado de Pillar al sureste y el sagrado estado de Faré el estado de din era un sitio comercial en el centro había un pequeño pueblo mercante llamado Sacadrivos gracias a sus caminos directos con otros reinos este estado era llamado sacrum lumen gracias a que este pueblo mantenia gran parte de su economia los demas poblados trabajaban la tierra y cuidaban el ganado para ser comercializado en sacrum lumen y uno de esos pueblos era Alai el pueblo que contaria la historia de uno de nuestros heroes 

el principe Eiden habia hecho varios cambios en cuanto al trato con los lucida, objetos que eran usados para la forja de armas mágicas en tiempos antiguos nadie, sabia para que el principe quería tanto lucida, había actuado raro durante los últimos meses, incluso había comenzado ha ejecutar excavaciones en el estado de Pillar, algunos viejos paranoicos aseguraban que el volvería a utilizar las sagradas puertas Dumdraco, magia muy apreciada por necrofagos, pero que le debería importar eso a un campesino como yo. 

yo fui criado aquí en Din por mi abuelo y tía en nuestra pequeña granja en el pueblo de Alai la brisa matutina pintaba el movimiento suave de los arboles los arroyos de agua cristalina  formaban serpientes azules por todo Din, dejaban la tierra fértil para el cultivo, solo los suspiros de los forasteros poblaban la calma de nuestro pueblo personas que habían sido criadas en estados como Basil la capital, el pensamiento invasivo en mi cabeza de poder vivir alli, en el palacio de Sacran en la corte real, me he de imaginar ser el príncipe ¿Que no daría yo por estar en su lugar? el principe Eiden era el ser mas noble que los ignianos pudiésemos ver somos seres muy normales y solo unos pocos dominan la magia aquí, el príncipe domina los siete artes incluidas el animuscorpus una magia rara y peligrosa en manos equivocadas, el es el heredero de Ignar, en cambio yo de tres vacas y dos cabras 

...

Todos los días me levantaba para trabajar la tierra era el primero en hacerlo, alimentar las gallinas, sacar la caca de los caballos, limpiar a las vacas, algo divertido sin duda. 

---¡Kaley! ¡Kaley! imbecil--- 

---hey señor estoy aquí--- mi abuelo ¿amable no? lo sé el es un poco especial era un viejo decrepito apunto de morir, pero así lo amábamos bueno eso creo, en el fondo sé que es bueno, bueno eso creo.

--- imbecil me has hecho caminar asta aquí---

---nadie te ha llamado--- bueno eso creo. 

--- tonto, tu tía Nya necesita algunas cosas de la plaza necesito que vayas allí y le traigas lo que pide y lo que pedirá para toda la semana esa mujer piensa que estaré yendo a la plaza todos los días--- en realidad quien va a la plaza soy yo pero, bueno. 

--- esta bien, tomaré sesenta gales para lo que necesites --- y baya que con sesenta gales comías un mes, no se por donde se meten todo lo que les traigo que nunca ha durado algo una semana comen como canem.

el camino hasta el poblado de sacrum lumen estaba a media hora a pie del poblado de Alai,me dirigí a la pequeña casa en medio de la gran cosecha de trigo y maíz para poder llegar era una casa acogedora a mi parecer la madera vieja vallas de madera para que nos cultivos no se salieran de su arado un gran derw al lado de la casa pintaba en suelo con sus hojas secas en otoño cuando la cosecha ya no estaba, todo esbozaba un cálido abrazo. 

entré a la pequeña casa y tome la lista de tía Nya junto los sesenta gales del cajón de mi abuelo y salí rumbo a la senda de Sacrum Lumen, 

la densa vegetación cubrían los caminos y apenas se podían observar algunas curvas del camino y algunos otros claros cerca de ella, el punto donde dos caminos se dividían eran la del canllav un árbol enorme que solo los lugareños sabíamos descifrar una caminata silenciosa sin dudas esa misma senda por las noches se iluminaba con los lunam canibus una especie de planta cuya luz azul era producida por la luna. 

---¡QUITATEE!--- un grito fuerte paso por mis oídos, era un rastreador real, estaba huyendo o persiguiendo quien sabe que su grito desgarrador no me daba buena espina que habrá sido lo que le asusto tanto

un leve dolor en mi cabeza y enormes ganas de vomitar me persiguieron hasta el canllav corrí hasta el árbol guía y con terror entre sus raíces me desmalle una vos me decía --- donde --- su tono no presentaba pregunta pero lo sentenciaba buscando respuesta --- no lo sé --- apenas podía sentir el helado rose de aquella dama su vos horrible dañaba mi cabeza y sentía un dolor tan fuerte como una chispa del metal fundido de las forjas en Din, con un movimiento brusco me tomo y volvió a sentenciar --- donde --- su tono otra vez inexpresivo y su voz cada vez mas tenebrosa, solo dije --- derecha --- el árbol guía reconoció mi voz y abrió camino rumbo a la derecha, me lanzo al suelo --- insolente --- dijo para continuar su camino, ¿Que había sido eso?