Piropos Para Conquistarte.

KyungSoo.

Él de verdad que esperaba con ansias a que llegara la clase de matemáticas para escuchar que JongIn tenía para él.

Era extraño... Porque hasta hace poco no sabía mucho de él, incluso ignoraba el hecho de que habían comido en más ocasiones de lo que pensó. Esto se lo había dicho BaekHyun cuando le comentó acerca del piropo que le dijo JongIn.

Se enteró entonces que el de piel ligeramente oscura, estaba enamorado de él desde hace un tiempo ya y que esos intentos de piropos buscados en internet era para conquistarlo.

Eso lo sorprendió. Nadie le había hecho algo como eso.

Fue por eso su reacción en la mañana cuando lo vio, se había sonrojado, sin poder evitarlo, y ocultado tras la puerta del casillero  para esperar a que el tono rojizo de su piel se aplacara y así poder dirigirle la mirada e iniciar una conversación. Lo que no se esperó es que éste soltara de inmediato unos de esos piropos e inmediatamente lo hiciera sonreír y reír como bobo.

Y que decir de esa intensa y ardiente mirada oscura...

Tuvo que irse para no decir alguna tontería y quedar en vergüenza. 

Pero le era extraño que a pesar de su reacción no le gustara JongIn. Sí, le agradaba. Pero no sabía mucho de él como para decir lo que exactamente le gustaba a parte de como lo hacia sonreír.  Por eso estaba cediendo un poco con el chico.

Por curiosidad..

El día que había empezado fresco pronto se tornó demasiado caluroso, al punto de que para las esperadas clases de matemáticas su espalda estaba húmeda.

Cuando llegó, notó a JongIn sentado mirando por la ventana, pero no lo alertó de su presencia, simplemente se sentó donde le correspondía mientras lo miraba de reojo, apartando la vista cuando, con rapidez JongIn miró a su dirección.

—Ni siquiera hice ruido. —

Murmuró para sí dejando sus materiales sobre la mesa. En todo momento sintió la mirada de JongIn sobre su costado, haciéndole sudar un poco más.

Él... Definitivamente no estaba en sus cinco sentidos, el calor lo había afectado y estaba un poco mareado  cuando levantó su pupitre y lo acercó al de JongIn. Incluso formó una sonrisa y se le ofreció como compañero de equipo cuando la maestra anunció que se podía y tenía que trabajar de esa forma.

No supo porque lo hizo, pero JongIn lo aceptó contento y eso lo molestaba. Porque él no dejaba de mirarlo haciendo que se pusiera un poco nervioso al punto de que sus manos estaban sudando y su espalda pareciendo que le echaron un balde de agua.

Ni siquiera cuando JongIn le piropeó sobre su gripe se había sentido tan avergonzado.

Se tensó más de lo que estaba mientras su mano secaba un poco del sudor de su frente cuando percibió movimiento por el rabillo del ojo en el pupitre de JongIn, aquella mirada era muy evidente, molestándolo completamente.

Y no era porque él lo estaba mirando, sino que lo estaba mirando mientras sudaba como puerco. ¿Qué pensará de él ahora? Eso era de lo peor, quería retroceder la hora para no entrar a la clase.

Su mano tembló cuando sintió una tela presionarse contra su mejilla, el lápiz cayó en la mesa sin hacer mucho ruido mientras, petrificado y sin palabras escuchó la voz de JongIn.

Su corazón se detuvo, ¿Justo ahora? No estaba listo para escucharlo hablar, ni mucho menos que le dijera un piropo en aquellas situaciones. Cuando JongIn secó su rostro sintió como él tomaba su mentón para que lo viera, mirando esos ojos oscuro mientras fruncía el ceño.

¿Qué?

¿Qué fue lo que el dijo?

¿Darle candela?

Ese...

—Pervertido. —

Las palabras salieron de su boca mientras tomaba su pupitre silenciosamente y se iba a su lugar.

¡¿Cómo era posible que estuviera esperando tanto tiempo para escuchar algo con referencia sexual?!

Él había estado emocionado para escuchar algo lindo y no algo que hizo que su piel descontrolada se calentara. Estaba enojado y no entendía como su rostro estaba más que enrojecido.

Cuando lo escuchó hablar para disculparse, lo miró con furia. —Ni se te ocurra. —

Y es que... A pesar de eso, no quería que se disculpara. Si él lo sentía así, no había necesidad de un "Lo siento".

No entendía que le molestaba más...

Si el piropo o que estaba sudando a mares bajo la mirada de Kim JongIn.

No, eso no importaba.

Definitivamente fue el piropo.

Levantó la cabeza, escuchando la voz de TaeMin cuando mencionó el pañuelo. Osea qué... ¡¿El los había visto?! ¿Vio esa vergonzosa escena donde sudaba como si estuviera en un maratón debido a la mirada de JongIn? ¿Lo vio cuando se sonrojó? Y más aún... ¿Cómo pudo atreverse JongIn a pedir un pañuelo prestado para secarlo?

Entonces se enojó porque él tenía un pañuelo. JongIn pudo pedírselo.

Quizás no quería avergonzarte más por tu exceso de sudor. Le estaba molestando.

Su subconsciente le habló.

Miró con furia a JongIn por haberlo humillado delante de más personas,
Titubueando su semblante cuando una mirada derrotada apareció en el atractivo rostro de JongIn.

Suspiró... Le daría un poquito de crédito por hacer que su, siempre inmutado y blanquecino rostro, se tornará rojo por segunda vez en un día.

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Tengan linda noche y un agradable día. 💕