Capitulo 12 - ¿Seguro?

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Se alejo un poco del rostro de Baekhyun, no era su intención despertarlo, solo necesitaba quitarse las ganas y ya. Lo miro una vez mas y con parsimonia cerro los ojos, descansaría un rato mas, sin importa la posición en la que se encontraba. 

Sin embargo, sin haber pasado siquiera un minuto luego de decidir dormir nuevamente, sintió nuevamente ese roce que había abandonado hacia un rato, pero esta vez venia acompañado de un potente agarre de su cintura y un leve jalón. 

Decidido a disfrutar plenamente, sin ponerse a pensar si se trataba de un sueño o de la realidad, se mantuvo de ojos cerrados, y correspondió aquel agarre, tomando la nuca de su contrario y pegando su cuerpo al suyo. Estaba comenzando a excitarse, volviéndose fuera de si. Baekhyun siempre lo sacaba de si, era toxico y lentamente se apoderaba de el, ya era tarde para querer abandonarlo.

-Minseok ¿Estas seguro?

-Si Baekhyun, úsame.

-Pero yo no quiero usart...

-¡Úsame!

No comprendió. ¿Que era eso de usarlo? ¿Acaso seguía dormido? Lo ultimo que querría seria usarlo. Pero no lo dejo replantearse nada, comenzó a besarle el cuello y lo descoloco. 

Entre beso y beso, que se transformaron en roces, caricia tras caricia, llevaron la situación a otro nivel, el ambiente se volvió húmedo y pasional, la ropa desapareció, eran la luna y el sol cruzándose en el atardecer. 

Minseok era otro, el sumiso y comprensivo que demostraba ser siempre se haba vuelto agresivo y demandante, tal y como era siempre que estaba con Baekhyun; quien sabia que el le causaba ese humor, el lograba sacar partes de su ser que siempre ocultaba para su propio bien. 

Mientras sus cuerpos hacían una fricción constante, logrando volverse uno, el castaño tomo los rubio cabellos con fuerza acariciando pero a la vez jalando de ellos, incitando al aludido que acelerara los movimientos.

A punto de llegar al clímax, Minseok causo que todo diera un freno inconcluso.

-Si tu puedes usarme, yo también lo haré.- alego jadeando, agitado. El aludido siguió sin comprender en ese momento aquella frase, pero simplemente se presto a obedecerle. 

Cambio de posiciones sin permiso ni aviso con su profesor y tomo la iniciativa, lo hizo suyo esta vez. Baekhyun emitió un sonido inetendible que provoco una sonrisa satírica en el rostro del castaño, apuro el paso, al mismo ritmo que le había pedido a su contrario hacia unos minutos.

A medida que los movimientos aumentaba, el rubio mas se regocijaba, importándole un comino los sonidos que emanaba, las expresiones que portaba, los movimientos que lograba. Sin pensarlo dos veces tomo a Minseok de las mejillas y lo atrajo hacia si, besándolo con desenfreno, el placer que le estaba causando lo estimulo para descolocarse y dejarse llevar, al igual que lo estaba haciendo el castaño.  

Ese roce pareció eterno, enorme, y húmedo, no se soltaron ni siquiera para respirar. Las caricias aumentaban a medida que los movimientos eran mas discretos y livianos, el momento en el que el clímax estaba en su máxima potencia.

Ambos finalizaron acostados, exhaustos uno al lado del otro, cubiertos por las sabanas. Respirando rápida y agitadamente. Baekhyun sonreía, era genuina y encantadora. Minseok poseía los ojos cerrados, y también portaba una leve sonrisa, respirando hondo, con su pecho subiendo y bajando lentamente.

Baekhyun le había vuelto a robar, complaciente, su virginidad, y en definitiva su alma. Sin embargo, no era el único, ya que Minseok había logrado tomar el control, algo que Baekhyun nunca había dejado. 

My Adictive Drug [XiuBaek]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora