Soy Layla Parker tengo 17 años y vivo en Nueva York. Cada día que pasa siento que mi vida se va a bajo poco a poco, que algún día tendré la suficiente valentía para acabar con este gran sufrimiento y es seguir viva. Ahora veo lo que todos me dicen...
Mi madre me desperto y yo no tenia ganas pero mi madre me dijo algo que no me creí. Salí corriendo a ver si era cierto, ahí estaba.
X: Hola ¿que tal?
Layla: ¿Que haces aqui Christopher?
Chris: Venia a ver como estabas no sabia que hacia tanto daño por favor perdóname-se arrodillo.
Layla: Estoy sonañando pero a la vez es tan real.-dude un momento-esto es un sueño.
Chris: No, te lo aseguro, soy yo el idiota que te lastimo.
Layla: Pero ¿por que?
Chris: Me dijeron que estuviste internada en el hospital y pase a verte, me di cuenta que soy un bestia y si me perdonas aun que sea se me quitara un poco de culpa.
Layla: Siéntate-me miro dudoso y se sentó-Chris te perdono a pesar de esto y espero volver a tener a ese chico que algún día fue mi mejor amigo.
Chris: Te prometo que intentare ser mejor persona y si poder volver a ser ese chico que algún día fue tu mejor amigo.
Layla: Gracias pequeño panda.
Chris: ¿Me dijiste pequeño panda?-asentí con la cabeza-extrañaba que me dijeras así.
Layla: Creo que iré a vestirme para ir a clases.
Chris: ¿Te puedo llevar?
Layla: ¿Me quieres llevar?
Chris: Si tu quieres yo encantado.
Layla: Va. Me cambio me tapo los moratones y nos vamos.
Chris: Esta bien, te espero.
Fui a mi cuarto y ahí me aliste lo mas sencilla posible. Unos simples pantalones vaqueros, una camiseta gris, una sudadera y mis zapatos.
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Me maquille los moratones para que no se me vean mucho y baje a la sala. La verdad me había sorprendido la actitud de Chris pensé que me odiaba y no me quería ver mas. A pesar de todo extrañaba a mi mejor amigo y mi confidente. Chris era mi mejor amigo desde los 4 años, crecimos justos hasta que un día me dejo sola y nunca me volvió a hablar, todo lo que el odiaba incluyendo a Pimentel se convirtió en sus mejores aficiones o amigos. Antes él era sencillo, humilde, sensible, amigable, era hombre de una sola mujer y siempre mi paño de lagrimas pero un día cambio se convirtió en un chico rebelde, insensible, frio, mujeriego, impulsivo y me golpeaba a su antojo.
Baje y ahí estaba con su sonría encantadora que siempre me gusto, parecía que mi mejor amigo iba a volver que lo volvería a tener y poder volver a contarle mis alegrías y mis penas. Estaba cada vez que discutía con mi padre y cada vez que discutía con mi hermana.
Chris: ¿Lista?
Layla: Claro que si.
Chris: Vamos-baje de las escaleras.
Layla: ¿Qué pasara cuando nos vean juntos?
Chris: Pues nos veran y como se atrevan a insultar a mi pequeña los enfrentare y los callaré porque nadie se mete con mi mejor amiga.
Layla: Gracias pero....¿pequeña?
Chris: Vamos a regresar el tiempo atrás y ahora seremos mejores amigos y te prometo que estaré contigo siempre.
Layla: Gracias Chris pero es hora de irnos o si no llegaremos tarde.
Fuimos todo el camino cantando como dos locos sin remedio tardamos como 30 minutos. Llegamos y lo primero que hice fue coger la mano de Chris, me sentía segura, empecé a caminar y la gente susurraba cosas que no sabia entender.
X: ¡¡suéltala!!!-le jalo del brazo a Chris.
Chris: Déjame tú no eres quien para mandarme.-se soltó de su agarre.
Layla: Déjalo por favor Zabdiel.-lo mire.
Zabdiel: ¿QUE? Ayer te muele a golpes y hoy apareces con él así como si nada.
Layla: Me pidió perdón y ahora volverá a ser lo que siempre fue.
Zabdiel: Tu novio.
Layla: ¿Que? Para nada será mi mejor amigo.
Zabdiel: No te entiendo.
X: Ya veo que ibas enserio con la apuesta que hiciste.
Chris: De que estas hablando Joel.-se puso nervioso.
Layla: ¿Qué apuesta Chris?
Joel: Ahora lo llamas Chris, que tierno-me miro con sarcasmo-es enserio no se lo has dicho.
Layla: Decirme el que.
Chris: Yo.....
Joel: No te preocupes se lo digo yo mira huerfanita Chris y yo apostamos a 500 dólares que podía volver a ser tu amigo y tú creerle-mire a Chris-y mira tu estas peleando con este-se refería a Zabdiel-por la amistad de Chris, que idiota eres.
Layla: Dime que no es cierto.
Chris: Esto....-suspiro-Layla lo que dice Joel es cierto-bajo la cabeza.
Layla: Entonces tu arrepentimiento, volverme a decirme pequeña, cantar juntos...-tome aire, estaba destrozada-fue una mentira.
Chris: Déjame explicarte por favor-me cogió de las manos.
Layla: Que quieres explicarme que soy una persona que usan cada vez que se les pega la regalada gana-me solté-que para vosotros no soy mas que un simple juego.
Chris: Layla por favor déjame-le pegue una cachetada y me fui corriendo.
Narra Chris
Había ido a casa de Layla con las ganas de ganarle la apuesta Joel, obvio no soy un perdedor, tenia que ganarme otra vez su amistad y así lo haría pero al verla bajar se me vino el mundo abajo tenia moratones por todos lados incluso un brazo vendado. No podía hacerlo a pesar de todo la seguía queriendo como el primer día. La ayude y nos fuimos a clases vi que Zabdiel me reclamaba todo lo de ayer pero luego llego el idiota de Pimentel y fastidio todo, le conto la apuesta y vi como su alma se partía yo me avergonzaba de mi mismo. Ahora si quiera volver a ser su amigo volverla a tener como antes poder reírme hasta mas no poder y por mis estupideces la volví a perder a mi amiga casi mi hermana. Verla irse corriendo fue mi destrucción sabia lo que había echo y que esto nunca me lo perdonaría me sentía fatal.
Joel: Toma tu dinero.
Chris: No quiero tu asqueroso dinero.
Joel: Era nuestra puesta deja de comportarte como un niño y cógelo te vendrá bien.
Chris: Quieres que lo coja y lo disfrute a costa del sufrimiento de otras personas, fui un estúpido al aceptar esa apuesta.
Joel: Ahí por dios tanto drama haces por alguien que no sentía lo mismo que tu, recuerda que ella nunca te ha amado ni te amara como tu a ella. Es una huérfana que no vale la pena.-lo golpee.
Chris: Solo se que vale muchísimo más que tu y que mi peor error fue conocerte.-me fui.
