Antes de salir del centro, Tae, JungKook y yo decidimos donde y a que hora quedaríamos esa tarde, para después ir cada uno en dirección a su casa.
JungKook cada vez me caía mejor, era un chico bastante alegre, aunque había momentos en los que se callaba de repente y me observaba, pero no le daba importancia, comenzaba a considerarle, junto a Tae, como un buen amigo.
Ya en casa, con las chicas fui a la cocina para hacer algo rápido de comer, habíamos quedado temprano ya que el instructor de canto nos había pedido una canción para el lunes siguiente, asique cuanto antes terminásemos, cada uno, mejor.
Alex entró junto con María a la cocina, viéndome cocinar se acercaron a mi, y por el rabillo del ojo pude ver como María y Alex compartían una mirada, eché las verduras cortadas a la olla, junto con unos trozos de carne y me giré para mirarlas.
-¿Qué pasa?- pregunté apoyándome en la encimera, María sonrió y señaló mi boca-¿Qué?
-Estás sonriendo- no me había dado cuenta siquiera, pero ¿qué tenía de especial que yo sonriese?
-¿Qué tiene que sonría?
-Lo que llevamos viviendo juntas tan solo has sonreído de verdad una vez- declaró María
-Cierto,las demás son sonrisas falsas, ¿te pasa algo?- abrí los ojos, impresionada, me conocían mejor de lo que creía, y eso no era bueno, no podía contarlas la verdad asique con pesar decidí mentirlas
-Solo he tenido unos cuantos momentos de nostalgia, de cuando todas estábamos en España...- las ganas de llorar me atacaron,por lo que rápidamente me di media vuelta y quedé mirando la encimera- ya sabéis , los buenos momentos- cogí una cuchara de madera y comencé a remover el guiso.
María posó su mano en mi hombro,mientras Alex sujetaba mi mano libre.
-Podemos revivirlos- bromeó Alex
-Es cierto, además volvemos a estar juntas- María habló sincera, en la voz se notaba que sabía que yo ocultaba algo- Voy poniendo la mesa- cambió de tema, cosa que la agradecí internamente.
Salieron de la cocina y la primera lágrima bajó por mi mejilla'la quité de un movimiento brusco con el dorso de la mano, no podía permitirme ser débil, debía ser fuerte o me hundiría asique esperé a que la comida estuviese echa y salí con la sonrisa más falsa de mi vida hacia la mesa del salón.
Mientras Lucero y Daniela limpiaban la mesa y los platos yo me subí a mi cuarto para ponerme mi ropa.
Ya vestida con mi camisa de tirantes negra, mi camisa a cuadros roja atada a la cintura, mis pantalones negros rotos, mis converse rojas y mi gorra con la visera hacia atrás entré al baño para pintarme la raya superior, volví a mi cuarto y cogí el móvil, las llaves, el paquete de tabaco, un mechero y el dinero y por fin bajé al salón, donde se encontraban todas.
Las chicas me miraron de arriba abajo hasta que Lucero finalmente habló.
-Tu vas a ligar- sonrió, al parecer eufórica por esa idea- Alex me debes 500 wons o tres tabletas de chocolate- Alex abrió los ojos
-¿En serio habéis apostado a ver si yo ligaba con alguien o no?- reí divertida, esto era surrealista, ambas asintieron y todas comenzamos a reír, miré la hora en el móvil, tenía 10 minutos para llegar al Starbucks del centro asique me despedí de las chicas y me puse en camino.
A cinco minutos de llegar me encendí un cigarro, sentía que algo malo pasaría y no sabía que podría ser, cosa que me ponía nerviosa. Llegué al lugar acordado, le dí una calada al cigarro y lo tiré al suelo, para ponerme a esperar a los chicos.
ESTÁS LEYENDO
Sing For Me JungKook
FanfictionEl chico se giró y se quedó mirándome, al igual que el peli-naranja, que se encontraba en su sitio hablando con el otro chico. Tae sonrió algo avergonzado a lo que blanqueé los ojos, como era eso posible, era mi sitio y no me cambiaría por un chico...