Ada wong hace una señal con las manos para que otros chicos nos llevaran a su guarida. Mientras todo esto ocurría nuestro compañero nos vigilaba de lejos y nos siguió sin que nadie se enterara. Una vez dentro nos ataron a los dos en una silla y Ada Wong junto con su ballesta estaba de pie delante nuestra. Dos chicos nos agarraban de los hombros por si se nos ocurría hacer algo. "¿Quiénes se esconden debajo de esas capuchas?" Dice Ada Wong mientras le ordena a uno de ellos que le quite la capucha a mi compañero.
- Vaya, vaya. Barry Burton. -Dice Ada al quitarle la capucha a mi compañero. Dime Barry ¿Por qué te uniste a esa pandilla?
- Que miedo tengo, seguro que nos dejas aqui para que los zombies vengan y nos mate. - Se rie.
- ¿Cuántas vidas te quedan Barry? ¿Todas? - Se miran fijamente y Ada le apunta con la ballesta.
La mirada de Barry afirma que todavía le quedan tres vidas y por ello le dispara una flecha explosiva. Al clavársela, mi compañero cae al suelo con la silla y muere al estallar la flecha. El cuerpo desaparece como por arte de magia y yo sorprendida miro a Ada de golpe.
Ada Wong da órdenes con la mano para que muestren mi rostro. Al hacerlo se aprecia mi pelo teñido a rubio y se queda extrañada.
- ¿Quién eres? No te conozco. - Se acerca a mi y me agarra del mentón para observarme mas de cerca. ¿Cuántas vidas te quedan?
- Lo último que recuerdo es a mi madre convertida en esos bichos y mordiéndome. Luego una chica me ayudó y me llevo junto con la pandilla. Soy nueva en este mundo.
¿Algo más que quieras saber?
- ¿Por qué te incomunicaste del exterior?
- Al encontrarme los de la pandilla me lo quitaron. Me comieron la cabeza con que los del exterior solo quieren jugar con nosotros y es por eso que estoy con ellos. Dicen que pueden ayudar a mi familia si me quedo con ellos.
- ¿Sabes como llegar a la guarida?
- Me taparon los ojos para que no lo viese.
- Todo tiene su lógica, pero ellos no pueden ayudarte con tu familia. Yo, en cambio si. Trabajo para los del exterior y como recompensa tengo esta ballesta capaz de matar a cualquier "jugador". Te dejaré ir pero prométeme que estarás de nuestra parte.
- Claro. ¡Muchas gracias!
Ada Wong me da un móvil para poder comunicarme con ella y me deja libre. Salgo corriendo de allí sin saber a donde ir y mi compañero que me espiaba se para justo delante de mi cuando ya estábamos lejos de aquel lugar. "Te vas a enterar chivata." Me dijo agarrándome del brazo. No se que decirle y me mete en un coche. Me golpea en el cuello dejándome desmayada y me lleva a la base de la pandilla. Me despierto con un fuerte dolor de cabeza y observo donde estoy. Mis compañeros me rodean gritándose unos a otros hasta que se dan cuenta de que me he despertado.
- ¡Jill, cuéntanos ahora mismo lo que has hecho! ¡Cómo te atreves a decir cosas de nosotros!
- Yo no dije nada.
- Si que lo hiciste.- Me dice el compañero que me vigilaba.
- Estáis confundidos. Ada Wong mató a Barry y yo lo único que hice fue intentar sobrevivir. Ahora creen que desconfío de ustedes y que me llevo bien con el exterior. Se piensan que soy una infiltrada aquí y no es así.
- ¿Cómo sabemos que no eres una infiltrada de verdad?
- Claire me salvó la vida mientras mi madre me comía el cuello. - Empiezo a lagrimar y gritándoles les digo: - ¿¡Creéis que no le debo la vida!?
Todos se miran sorprendidos por mi reacción y murmuran entre ellos.Me dan la mano y me ayudan a levantarme del suelo. Dicen que confían en mi pero que debo entender que me tienen que vigilar.
En este mismo momento Ada Wong está hablando con el exterior. Intenta buscar información sobre mi pero ni si quiera los del exterior reconocen a alguien con mi apariencia. Se ve que la chica de la pandilla hizo un buen trabajo al cambiarme de aspecto. Ada Wong esta desconcertada y a la vez intrigada sobre mi. Un helicóptero aparece en el tejado del edificio donde se encontraba ella y suspira. Los chicos que trabajan con ella se acercan y traen a un tío del helicóptero. Le amarran en la silla y se dispone a un interrogatorio.
- Solo te quedan dos vidas Barry, será mejor que hables sino quieres que... bueno, se dice que el cielo es muy bonito.
- ¡Nos veremos en el infierno!
- ¿Qué sabes de tu compañera? ¿Cómo se llama?
- ¿Tan importante es? Porque prefiero hablar de nosotros dos. No tienes porque estar celosa. - Le guiña el ojo.
- Como quieras. - Le apunta con la ballesta y le dispara una flecha normal. Sin hacerle daño se acerca y se lo arranca del pecho rápidamente. - Lárgate de aquí, no quiero verte mas.
Barry extrañado por lo que acaba de hacer se larga sin más.
- ¿A qué ha venido esa flecha si no le hace nada jefa?- Le pregunta uno de sus acompañantes.
- Esas flechas no hacen daño ni dejan heridas. Pero es capaz de introducir cosas al cuerpo y eso es lo que he hecho. Le he metido una especie de micrófono. Ahora podremos saber toda la verdad.