–¡Tengo miedo!, no no, ¡Yo tengo miedo!– Gritaba JungKook mientras que con toda su fuerza se aferraba al asiento.– No quiero, ¡Tengo miedo!
Hobi hacia fuerza para sacar a su amigo de ahí, pero nada, era imposible, ya que el muchacho se aferraba al asiento como de que su vida se trataba de ello.
–¡Vamos! ¡No puedes quedarte aquí toda la noche!– Exclamó, tanta fuerza uso que el mayor se cayo para atrás. –¡Mi culo! ¡Duele! – Se paro rápidamente acariciando la zona en la que se golpeó.
El menor no paraba de reír, hasta que se ahogo con su propia saliva.
Esta vez era HoSeok el que reía.–¡Vamos Kook!, ¿Acaso Superman tenía miedo a no ser aceptado por la sociedad?
–No...– Murmuró.
–¿Acaso Luke Skywalker tenía miedo de enfrentarse a su padre? – Decía mientras ponía sus manos en sus caderas haciendo una pose heroica, aprovechando la luz que salía de atrás, y una pequeña onda de aire le pegaba en su rostro, se sentía como un superhéroe.
–Pero... Él no sabía que era su padre...– Fue interrumpido.
–Ese no es el punto, el punto es que hoy serás un superhéroe, no le tendrás miedo a nada y te divertirás. –Le jalo de un brazo para ponerlo en su lugar haciendo la misma pose que HoSeok hace unos minutos.
–Esta noche soy un superhéroe.–murmuró.
–¡No te escucho!– Animó HoSeok.
–Está noche soy un superhéroe.–Hablo nuevamente un poco más alto.
–¡Sigo sin escucharte!
–¡Está noche soy un superhéroe!–Exclamó.– SOY UN SUPERHÉROE ESTÁ NOCHE. –Gritó y salió corriendo a esa casa dejando todos sus miedos y nervios atrás con HoSeok.
Toda la gente que estaba a su alrededor miraba extrañado a aquel chico que corría hacia la casa gritando "Esta noche soy un súsuperhéroe"
–¡Ese es mi chico! –Exclamó HoSeok como una madre orgullosa.
No perdió el tiempo y se fue corriendo detrás del chico.JungKook no paraba de repetir esas palabras. Entro a la casa, la música a todo volumen adolescente descontrolados bailando otros besándose y haciendo cosas obscenas para su edad.
Miro a todos y se dispuso a pasear por la casa a ver qué se encontraba.
Mientras más caminaba más olía a alcohol y se encontraba más adolescente hormonales.
A penas llego a la cocina y una risa muy contagiosa llego a sus oídos.
Un chico alto con cabello rosado estaba sentado en la isla de la cocina riendo a todo volumen.–Ay ay ay.–El chico retomaba aire.– Aquí va otro, ¿Qué le dijo un pez a otro pez? –Hablaba conteniendo su risa y apretando los labios.
–¿Qué le dijo? – Se escucho una voz muy aguda.
El pelirosa no se aguanto y dio la respuesta. – ¡Nada! – Se empezó a reír con una risa extraña, que JungKook al segundo de escucharla la catalogó como "Risa de Limpia vidrios"
–¡Que gracioso eres, hyung! – Reía el chico de voz muy aguda.
JungKook sintió unas manos rodear sus hombros.– Veo que ya conociste a mis amigos.– Hablo HoSeok.
–Nope, sólo estaba viendo.– el mayor rió ante su comentario.
–Ven, te los presento.
Se dirigieron a donde estaban ellos. Estaban tres chicos el pelirosado que estaba sentado en la isla de la cocina, un pelirrojo el cual estaba de pie al frente del chico que se reía raro, y uno con cabello gris que tenía una cara de "Really Negga, tu chiste no dio risa"
–Te los presento, él es Jin –Señalo al chico de cabello rosado.– JiMin y YoonGi.
JungKook los saludo y se presentó, el menor solo conocía a YoonGi, siempre sintió una rara atracción por el pálido, pero se dio cuenta que era totalmente imposible que estuvieran juntos como pareja.
HoSeok los dejó solos para buscar unas bebidas para él y para JungKook.
–Bueno... Yo me retiro mi gente bella.– Jin se bajo de la mesa.– Voy a buscar a mi hijo.–Rió.– Nah, yo no tengo hijos. ¡Estoy solteroski y hago lo que quiero!– Se tambaleaba de un lado para otro mientras reía.– ¡Jimeno ven pa' acá! – Río de nuevo para después adentrarse a la pista de baile.
–¡JungKookie! –Exclamó el pelinegro riéndose.– Aquí esta.–Le entregó un vaso con un líquido que olía fuerte.–No sé que es, pero tómalo con sabiduría, gracias... Cuídate y disfruta.¡Eres libre de hacer lo que quiera!–HoSeok rió y se fue a la pista de baile pero antes de entrar a ella se detuvo se volteo para decirle algo al menor.– ¡Recuerda, esta noche eres un superhéroe – dijo guiñándole un ojo.