O2. sheep, lamb skewers and pillows

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La noche anterior, Yoongi había estudiado hasta muy tarde para un exámen y no logró descansar lo suficiente.

Por suerte, Jungkook jugaba distraído con otro chico de su edad. Así que podía tomar una siesta mientras llegaban a la escuela, sin ser molestado.

Recargó su cabeza sobre el vidrio de la ventana y dejó caer sus párpados, como telones de terciopelo blanco.

Esperaba soñar con algo agradable, tal vez brochetas de cordero.

🐰

— Hyung, despierte. — Yoongi entreabrió sus ojos despacio. Jungkook daba pequeños golpes sobre su hombro desde el asiento contiguo.


— Qué quieres. — contestó apartando la mano del menor.

— Se ve muy cansado, ¿ha dormido bien? Yo siempre me acuesto temprano para no tener sueño en clases. ¿Con qué estaba soñando?

— Déjame, Jeon. — Yoongi le dio la espalda e intentó retomar su sueño, pero le era difícil con los bruscos movimientos del autobús al pasar sobre algún bache, y Jungkook lo notó.

— Yoongi hyung, ¿sabe que hago cuando no puedo dormir? ¡cuento ovejas! Debería intentarlo, tal vez le ayude a descansar. — sonrió, mostrando sus dientes de conejo.

— gracias...

El consejo de Jungkook no fue tan malo después de todo. Estaba perdiéndose entre las infinitas ovejas esponjosas, como las almohadas de su cama, o como la suave piel de Jungkook.

Ovejas... Brochetas... Almohadas... Jungkook...

— Hyung, ¡Yoongi hyung! — Yoongi dió un respingo al ser despertado nuevamente por el molesto chico.

— ¡¿Ahora qué quieres?!

— ¿Qué cuentan las ovejas para dormir?

— ¡No lo...!

— ¡Oh, hyung! Ya llegamos a la escuela, que bueno que pudo descansar un poco gracias a mi. — el castaño colocó su mochila sobre su espalda y bajó del autobús, sonriéndo muy complacido.

Yoongi no sabía qué contaban las ovejas para dormir, pero él contaba hasta 10 para no perder la calma con Kook.

🐰

shut up {yk}Donde viven las historias. Descúbrelo ahora