Valerie
Cuando salimos de clase, le envío un mensaje a Nessie diciéndole que voy a casa de Evan a comer. Caminamos unos 15 minutos hasta llegar a su casa, que tiene dos plantas. Cuando entro no me imaginaba que la casa fuese así. Hay un gran comedor con una mesa central, con seis sillas y un ramo de flores en el centro, a la derecha un gran sofá para 8 personas con una gran televisión plana y unos cuantos cuadros. A la izquierda hay unas escaleras que suben y una gran cocina al estilo americano. Detrás hay una puerta abierta que da al baño. Evan sube y yo le sigo. La planta de arriba consiste en habitaciones y un baño. Él entra a una y entro detrás suyo.
Su habitación tiene una cama doble en el centro y unos armarios empotrados en la pared de la derecha. A la izquierda hay una ventana de dos hojas y un escritorio. Al lado hay tres estanterías en las cuales hay algunos trofeos, fotos con sus familiares y amigos, supongo, y algunos libros. Se acerca a la ventana y la abre.
-Mi madre llegará en una media hora, ¿que quieres hacer mientras tanto?
La verdad es que no tenía ni idea de que quería hacer. Pensaba que solo íbamos a comer.
-No sé. -pero lo luego se me ocurre una cosa- ¿Puedo cotiller tu habitación? -se ríe y asiente con la cabeza.
Abro el armario y le miro la ropa. Desdoblo algunas camisetas y veo una que me gusta, así que me la pongo. Noto que me está mirando, pero le ignoro y voy a las estanterías. Leo lo que pone en algunos trofeos: 'Primer puesto en el torneo de futbol de 2012'; 'Segundo puesto en el torneo por equipos de natación el 2009', y algunos más. Luego veo una foto en la que está con los que supongo que son sus padres, otras en las que sale con sus amigos, y otras pocas de él cuando era más pequeño. Noto que se pone a mi lado.
-Te queda bien esa camiseta. -dice susurrándome al oído- Pero estarías más sexy sin pantalones.
-Ya te gustaría, idiota. -me giro y le miro- A mí también me gusta, creo que me la llevaré. -le sonrío.
Sonríe y sigo cotilleando su habitación. En el hay unos cuantos libros, de los cuales veo El Principito, Los Juegos del Hambre y Las Crónicas del Asesino de Reyes.
-¿Te gusta leer? -pregunto un poco sorprendida.
-Si, ¿acaso te sorprende? -dice levantando una ceja.
-Si, pensaba que solo te entretenías con el futbol y persiguiendo a chicas.
-Yo no las persigo, ellas me persiguen a mí.
-Que creído te lo tienes... -susurro dándole la espalda.
Cuando termino de cotillear nos sentamos en la cama y hablamos un rato sobre esos libros. Nos quedamos un rato callados y me doy cuenta de que me está mirando.
-¿Por qué me miras? -le pregunto.
-Me gustan tus ojos.
-Ah... -noto que me sonrojo.
Nos quedamos un rato más mirándonos, y noto que se va acercando. En ese momento se abre la puerta de la habitación y vemos a un chico un poco más mayor que nosotros.
-¿Ya has ligado, hermanito? Anda que has tardado. -se ríe.
Nos apartamos, se levanta y se acerca a su hermano.
-Cállate, imbécil. ¿Has venido tú solo?
-No, mamá está abajo haciendo la comida. -mira en mi dirección- ¿Quién es?
-Es Valerie, una amiga.
-Si, amiga... -se ríe- ¿Y por qué lleva puesta tu camiseta?
-Porque le ha gustado. -dice un poco molesto por el 'interrogatorio' de su hermano.
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Valerie (pausada indefinidamente)
JugendliteraturDespués de tu primer amor, viene el amor verdadero. Valerie Haloway, de 17 años, tiene ganas de enamorarse, pero tiene miedo a que le hagan daño, hasta que a principios de 2º de bachillerato conoce a Evan, el chico nuevo. ¿Se volverá a repetir la hi...